La Policía Nacional de Filipinas descartó este lunes que exista relación entre los asesinatos de cinco ediles en distintos puntos del país en la última semana, dos de ellos alcaldes, un vicealcalde y dos concejales.
"No tenemos nada de qué preocuparnos o tener miedo porque esto no es sistemático y no hay un patrón. No sabemos si hay una relación política. Puede haber muchas razones", afirmó hoy en una rueda de prensa el jefe de la Policía Nacional, Oscar Albayalde.
El pasado sábado 7 de julio fueron asesinados tres funcionarios locales: el vicealcalde de Tres Martires -al norte de Filipinas-, Alex Lubigan; y los concejales de Zamboanga y Kapatagan, Michael Magallanes, y Nassif Palawan Bansil, respectivamente, ambos en la isla sureña de Mindanao.
La primera de estas muertes violentas de la pasada semana fue la del alcalde de Batangas, Antonio Halili, tiroteado el 2 de julio durante una ceremonia oficial en los exteriores del ayuntamiento.
El día siguiente fue asesinado el alcalde del municipio General Tinio, Ferdinand Bote, mientras viajaba en su automóvil.
"Estamos haciendo todo lo posible por investigar y resolver estos casos y ofrecer justicia a quienes la merecen", aseveró Albayalde.
Los crímenes están aún bajo investigación policial, aunque se sospecha que el asesinato de Halili tenga que ver con el tráfico de drogas, pese a negarlo su familia.
Halili figuraba en la polémica "narcolista", un documento con los nombres de funcionarios públicos implicados en el tráfico de narcóticos que el presidente, Rodrigo Duterte, ordenó elaborar en el marco de su guerra contra las drogas.
Paradójicamente, Halili, que fue uno de los alcaldes que más apoyó esa campaña de Duterte, fue muy polémico porque impulsó los llamados "paseos de la vergüenza", en los que la policía exhibía públicamente a los detenidos por presunta posesión de drogas.
De momento, no hay indicios de que el resto de los políticos locales asesinados tuvieran alguna vinculación con el narcotráfico.
El asesinato del vicealcalde Lubigan el sábado, también al recibir múltiples disparos mientras viajaba en su coche, se produjo al día siguiente de que éste anunciara que se iba a presentar a las elecciones para encabezar el ayuntamiento de Tres Martires.
Desde que Duterte asumió la presidencia hace dos años, han sido asesinados al menos 11 alcaldes y cinco vicealcaldes en Filipinas, algo que grupos de la oposición y defensores de los derechos humanos achacan a la cultura de la impunidad que el presidente ha instaurado en el país con su violenta campaña antinarcóticos.