El impacto del tifón de categoría máxima Mangkhut, que este jueves se encuentra dentro del área de responsabilidad de Filipinas, puede ser tan devastador como el supertifón Haiyan, que causó más de 6.000 muertos y 14 millones de damnificados en 2013, advirtieron los servicios de emergencia filipinos.
"Las agencias del Gobierno están preparadas para lo peor", advirtió el director ejecutivo del Centro Nacional de Reducción de Desastres (NDRRMC), Ricardo Jalad, anoche en rueda de prensa.
Las autoridades filipinas ya han desplegado personal de los servicios de emergencia en el norte de la isla de Luzón, el extremo más septentrional del país, donde se espera que Mangkhut toque tierra el sábado por la mañana.
El centro de Mangkhut, bautizado Ompong en Filipinas, se encontraba este jueves a las 10.00 hora local (23.00 hora del jueves en Chile) a 725 kilómetros de la costa de Luzón, con vientos sostenidos de 205 kilómetros por hora y rachas de 255 kilómetros por hora, según el último boletín de la agencia meteorológica PAGASA.
Si los vientos sostenidos que acompañan la tormenta superan los 220 kilómetros por hora, Mangkhut, que es ya el mayor tifón de la temporada, podrá ser considerado un supertifón como Haiyan.
La Cruz Roja, que también ha desplazado sus equipos de emergencia al norte del país y activado el nivel más alto de alerta, advirtió de que hay 10 millones de filipinos que viven en las áreas por las que se espera que pase el tifón.
"Estamos preocupados por los 10 millones de personas que viven en el camino de esta tormenta destructiva, incluidos los que han sido desplazados varias veces debido a las lluvias monzónicas de julio y agosto pasado", señaló en un comunicado el presidente de Cruz Roja en Filipinas, Richard Gordon.
Se espera que los fuertes vientos y lluvias torrenciales de Mangkhut causen inundaciones, deslizamientos de tierra y olas gigantes en toda la isla de Luzón, donde se sitúan las principales tierras agrícolas del país.
PAGASA activó el primer nivel de alerta por ciclón en todas las provincias de Luzón y en Samar, que pertenece a la región central de Bisayas, ante la llegada de Mangkhut, que se desplaza hacia el oeste a unos 20 kilómetros por hora.
Filipinas recibe cada año entre 15 y 20 tifones durante la temporada de lluvias que este año empezó el 8 de junio y suele concluir entre noviembre y diciembre.