Los presidentes de seis países miembros de la Unasur exigieron este jueves a España, Francia, Italia y Portugal que pidan "disculpas públicas" por denegar el tránsito aéreo al avión oficial del mandatario boliviano, Evo Morales, el pasado martes.
En una reunión de emergencia en la ciudad boliviana de Cochabamba para examinar la crisis abierta con Europa a raíz de este incidente, los jefes de Estado de Argentina, Bolivia, Ecuador, Surinam, Uruguay y Venezuela aprobaron una declaración en la que también reclaman a esos Gobiernos que expliquen esa decisión.
"El agravio sufrido por el presidente Morales ofende no solamente al pueblo boliviano sino a todas nuestras naciones", señala el manifiesto, que fue leído por el canciller anfitrión, David Choquehuanca, tras una sesión plenaria abierta en la que intervinieron todas las delegaciones asistentes.
En la declaración se incluye a España entre los países que vetaron expresamente el tránsito aéreo del avión presidencial boliviano, a pesar de que el Gobierno español ha negado que existiera ninguna prohibición en ese sentido.
La declaración
"Denunciamos ante la comunidad internacional la flagrante violación de los tratados internacionales que rigen la convivencia pacífica (...) entre nuestros Estados, que constituye un acto insólito, inamistoso y hostil, configurando un hecho ilícito que afecta a la libertad de tránsito y desplazamiento de un jefe de Estado y su delegación oficial", arranca la declaración.
En ella se denuncian "el atropello y las prácticas neocoloniales que aún subsisten en nuestro planeta en pleno siglo XXI y la falta de transparencia sobre las motivaciones de las decisiones políticas que impidieron el tránsito aéreo" del avión del presidente boliviano.
Condena asimismo "las prácticas internacionales de espionaje que ponen en riesgo los derechos de los ciudadanos y la convivencia amistosa entre naciones".
"El proceso de construcción de la patria grande en el que estamos comprometidos debe consolidarse en pleno respeto a la soberanía e independencia de nuestros pueblos, sin injerencia de los centros hegemónicos mundiales, superando las viejas prácticas en las que se pretende imponer países de primera y de segunda clase", prosigue.
El texto aprobado declara que "la inaceptable restricción a la libertad del presidente Morales, convirtiéndolo virtualmente en un rehén, constituye una violación de derechos no solo al pueblo boliviano sino a todos los países y pueblos de Latinoamérica, que sienta un peligroso precedente en materia de derecho internacional".
Rechaza "las actuaciones claramente violatorias de normas y principios básicos del derecho internacional, como la inviolabilidad de los jefes de Estado" y exige a los Gobiernos de Francia, Portugal, Italia y España que expliquen su decisión y "presenten las disculpas públicas correspondientes en relación a los graves hechos suscitados".