El ex presidente boliviano Jaime Paz Zamora anunció que no viajará a La Haya con la delegación para defender la demanda marítima contra Chile, lo que fue interpretado como un desaire a la unidad nacional.
El ex mandatario (1989-1993), dijo a medios locales que "tomé la decisión de disculparme y no ir a La Haya. Prefiero, como todos nuestros compatriotas, esperar el resultado en territorio nacional y rogar a todos los santos y con el optimismo de siempre deseando que las cosas salgan bien".
Paz Zamora desistió viajar alegando, entre otros motivos, porque el gobierno boliviano quiere contraponer la reclamación marítima boliviana al respeto que exigen varios sectores a un referendo que negó al presidente Evo Morales la posibilidad de ser candidato nuevamente en 2019.
Paz Zamora cuestionó el respaldo que Morales brindó al presidente venezolano, Nicolás Maduro, y también lamentó que el mandatario boliviano le ataque constantemente en Twitter. "Me insulta, me calumnia, me dice de todo. Y yo pienso qué pasa, me ha invitado a viajar con él a La Haya, podía esperarse un poco a que volvamos de La Haya para insultarme", indicó.
El ex presidente observó una supuesta ambigüedad y poca claridad en la forma en que la cancillería y el agente boliviano ante La Haya, el también ex presidente Eduardo Rodríguez (2005-2006), están manejando la demanda marítima a Chile.
García Linera: "Le está dando la espalda a Bolivia"
Por su parte, el vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, expresó su sorpresa tras el anuncio de Paz Zamora, de quien consideró que "le está dando la espalda a Bolivia y a esta muestra de unidad en torno al mar".
"Hubiera sido lindo que Jaime Paz hubiera aceptado esta invitación del presidente para mostrar ello, pero si no lo hace, ni modo, él es el que se queda rezagado ante la historia y el resto del país mira hacia adelante con optimismo y esperanza", agregó.
Paz Zamora iba a ser parte de una comitiva de 15 invitados que acompañarán las audiencias orales en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, que se celebrarán del 19 al 28 de marzo y constituyen una de las fases más importantes del litigio antes de que se conozca el fallo del tribunal, previsto para fines de 2018.