Una serie de operativos policiales permitieron desarticular en la ciudad boliviana de El Alto una "megafábrica" en la que presuntamente se elaboraban medicinas falsas y desde la cual al parecer se traficaban entre Bolivia y Perú.
El comandante de la Policía Boliviana, general Yuri Calderón, declaró a los medios en El Alto, frente a la fábrica desarticulada, que los operativos se desarrollaron entre el jueves y esta pasada madrugada en esta ciudad y en su vecina La Paz, y culminaron con 17 detenidos.
Calderón manifestó que la desarticulación representa "un duro golpe" al tráfico de fármacos adulterados, tras meses de investigación para combatir "un delito mucho más grave que el narcotráfico", puesto que "toda la población se ve engañada" al adquirir medicinas falsas que ponen en riesgo su vida.
El mando policial agregó que se logró la incautación de un revólver y un fusil, supuestamente utilizados para la "seguridad" de la fábrica.
Maquinaria de medio millón de dólares
El lugar allanado contaba con todo lo necesario para producir las medicinas adulteradas, como productos químicos, sus envases y los folletos que acompañan a los fármacos, con maquinaria como una imprenta de alta tecnología valorada en alrededor de medio millón de dólares, relató el jefe policial.
Por su parte, la Fiscalía General del Estado de Bolivia informó en un comunicado de que los operativos fueron coordinados entre la Fiscalía Departamental de La Paz y la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de la Policía Boliviana.
El fiscal Anticorrupción del caso, Marcos Villa, detalló que "en está fabrica ilegal se halló envases primarios y secundarios de una variedad grande de fármacos con etiquetas falsas de distintos laboratorios nacionales y extranjeros", algunos de Argentina.
"Incluso se falsificaban sueros y medicamentos hospitalarios, que eran enviados de Bolivia a Perú y de Perú a Bolivia", precisó el fiscal, citado en el comunicado.
Las medicinas falsificadas eran introducidas al mercado negro principalmente en Santa Cruz, El Alto y La Paz, las tres mayores ciudades de Bolivia, según el reporte.
El fiscal informó que "la presunta cabecilla de este ilícito, Lidia P., cumple la detención preventiva en el penal de Miraflores", una cárcel de mujeres en La Paz.
El Ministerio Público emitió una imputación formal por delitos contra la salud pública, enriquecimiento ilícito y asociación delictuosa, entre otros, explicó el fiscal.
Seguridad sanitaria en entredicho
La detención a comienzos del pasado abril en Desaguadero, en la frontera entre Bolivia y Perú, de supuestos implicados de una red de de falsificación de medicinas, la mayoría peruanos, desencadenó una serie de operaciones policiales en territorio boliviano para detectar fármacos adulterados.
Estas operaciones pusieron en entredicho la seguridad sanitaria en el país y la Fiscalía advirtió de que entidades públicas como la Agencia Estatal de Medicamentos (Agemed) y el Servicio Departamental de Salud de La Paz pudieron incurrir en incumplimiento de funciones, por la falta de control sobre la venta de medicinas.