Los presidentes de la Cámara de Diputados y Senadores de Bolivia, Gabriela Montaño y José Alberto Gonzáles, respaldaron al presidente Evo Morales en sus sospechas contra el cónsul chileno en Bolivia, Milenko Skoknic, a quien acusó de reunirse con dirigentes opositores para desestabilizar a su Gobierno.
"No tiene por qué llevarse adelante reuniones de índole político y que tengan que ver con la política interna de país entre el cónsul de Chile y actores políticos de la oposición", indicó Montaño.
Mientras que González agregó que "la cancillería chilena debe llamarle la atención y decirle 'Señor Skoknic, usted no puede hacer esto, estas no son sus funciones'. Bolivia tiene todo el derecho que ante un cónsul que está extralimitándose en sus funciones pueda simple y llanamente declararlo persona no grata".
La Cancillería chilena, en réplica a dicha imputación, dijo este martes que Bolivia respondió con una amenaza a "nuestra invitación al diálogo" y que "francamente todo tiene un límite (...) Nos vemos en La Haya".
En tanto, el ex presidente de Bolivia y vocero de la causa marítima de su país, Carlos Mesa, afirmó que Chile "pretende tergiversar" la voluntad de diálogo boliviana.
"La propuesta formal que hizo el presidente (Evo) Morales de una reapertura de relaciones con la garantía del papa para resolver en cinco años el tema del acceso soberano al mar es una demostración de una voluntad de diálogo inequívoca que ahora el canciller de Chile pretende tergiversar", afirmó en declaraciones recogidas por EFE.
Agregó que "no es verdad el tema de que Bolivia esté en una actitud agresiva, sino, por el contrario, Bolivia ha plantado una posición de diálogo".