Brasil anticipará campaña de desarme tras masacre en escuela de Río
La medida incentivará a los ciudadanos a entregar las armas de fuego que tengan en su poder.
En 2004 y 2008 se recolectaron medio millón de unidades en iniciativas similares.
La medida incentivará a los ciudadanos a entregar las armas de fuego que tengan en su poder.
En 2004 y 2008 se recolectaron medio millón de unidades en iniciativas similares.
El Gobierno brasileño anunció que anticipará su próxima campaña de desarme de la población civil, debido al asesinato de 12 niños en una escuela de Río de Janeiro, perpetrado por un ex alumno la semana pasada.
El ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, afirmó que la campaña, en la que se incentivará a los ciudadanos a entregar a las autoridades las armas de fuego que tengan en su poder, comenzará previsiblemente en la primera semana de mayo.
"Está demostrado que cuando se realizan estas campañas, hay una reducción muy fuerte en la mortalidad, que baja más del 50 por ciento en Brasil", dijo el ministro a periodistas, después de reunirse con representantes de varias ONG con los que debatió sobre los preparativos de la campaña.
El gobierno de Brasil realizó dos campañas de desarme, en 2004 y 2008, y con ellas consiguió retirar de circulación cerca de medio millón de armas de fuego.
Las autoridades garantizan el anonimato de quien entrega una pistola y además ofrece una indemnización en dinero para incentivar a los ciudadanos.
Todavía no se han definido los valores que se van a pagar. En la última campaña, las compensaciones oscilaban entre 100 y 300 reales (entre 63 y 190 dólares aproximadamente).
Masacre en escuela
El pasado jueves, un ex alumno de la escuela Tasso da Silveira, Wellington Menezes de Oliveira, asesinó a tiros a 12 estudiantes e hirió a otros 12, dos de los cuales siguen internados en estado grave, y después se suicidó.
La policía cree que el asesino tenía problemas mentales y ha descartado que haya colaborado con otras personas para preparar el ataque.
El asesino dejó varias notas preparadas para que las encontrara la policía, que estaban llenas de contradicciones, según las autoridades.