La presidenta de la Convención Constitucional, Elisa Loncón Antileo, constituyente y representante del pueblo mapuche, en su discurso al ser electa para dicho cargo expresó su "solidaridad" con los "otros pueblos que sufren" e hizo referencia al genocidio en Canadá, que actualmente mantiene un conflicto en el país norteamericano.
En su emocionante discurso, en gran parte Loncón se refirió a nuestro país, pero aprovechó la instancia para dar una mano al grupo aborigen canadiense: "Quiero expresar también mi solidaridad con los otros pueblos que sufren", dijo la constituyente.
"Hemos escuchado por la información de la televisión lo que ha ocurrido con los niños indígenas de Canadá, es vergonzoso cómo el colonialismo ha atentado y ha atacado el futuro de las naciones originarias. Nosotros somos pueblo solidario, por eso, hermanas y hermanos, es que nos hemos jugado", sostuvo.
YA VAN MÁS DE MIL MENORES INDÍGENAS ENCONTRADOS
En el último catastro, ya van más de 1.100 los restos de menores indígenas encontrados en las últimas semanas en distintos lugares de Canadá, siendo el último hallazgo registrado la semana pasada, cuando se encontraron al menos 182 tumbas no identificadas encontradas en terrenos de una residencia escolar.
Las tumbas no marcadas han sido localizadas en la antigua residencia escolar de St. Eugene Mission School, en la provincia de Columbia Británica, en el oeste de Canadá, dijo el grupo lower kootenay, el que se suma al de finales de mayo, cuando los tk'emlúps te secwépemc, otro grupo indígena, reveló el hallazgo de los restos de al menos 215 niños indígenas en la antigua residencia escolar de Kamloops.
Anteriormente, otro grupo aborigen de la provincia occidental de Saskatchewan, los cowessess, anunció que habían encontrado 751 tumbas sin identificar en la escuela residencial Marieval.
En las residencias escolares, que fueron establecidas a finales del siglo XIX por el Gobierno de Canadá para borrar la cultura indígena, los niños eran sometidos a abusos físicos, psicológicos y sexuales. Se estima que miles de ellos murieron durante su estancia en los internados.
Debido a esto, uno de los principales grupos indígenas de Canadá pidió a la Iglesia Católica que pague los 20 millones de dólares estadounidenses que ofreció en compensación el 2006 a los supervivientes de las residencias escolares del país y que todavía no ha abonado por entero.
INCENDIOS A IGLESIAS CATÓLICAS
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, condenó la ola de ataques contra templos católicos registrada en el país y señaló que "los actos de vandalismo e incendios que se están produciendo en todo el país, incluidos contra iglesias católicas, son inaceptables y equivocados".
Solo en la ciudad de Calgary, en el oeste de Canadá, el 1 de julio, el día de la fiesta nacional del país, 10 iglesias sufrieron actos vandálicos y fueron pintadas de naranja y rojo. En el resto del país, casi una decena de templos han sido destruidos por incendios.
Aunque las iglesias no son los únicos objetivos de la ira. Las estatuas de la reina Victoria y la reina Isabel que estaban situadas en el Parlamento provincial de la provincia de Manitoba fueron derribadas el 1 de julio por unas 1.000 personas, mientras que otra estatua de la reina Victoria situada en la localidad de Kitchener, en las cercanías de Toronto, también fue cubierta en pintura roja; y en la localidad de Victoria, en la provincia de Columbia Británica, la estatua del capitán James Cook, un explorador británico del siglo XVIII, fue arrojada al Océano Pacífico.
Trudeau, que en las últimas semanas ha criticado a la Iglesia Católica y el papa por no pedir disculpas a los indígenas canadienses por lo sucedido en las residencias escolares, dijo que cree que la quema de iglesias daña a las personas "que están de duelo y necesitan lugares para cicatrizar heridas y buscar consuelo", aunque acotó que el descontento de la población indígena de Canadá "es real", tras vivir desde hace generaciones con "trauma" y sufriendo "racismo institucional".