El gobierno chino ha lanzado una campaña nacional contra la prostitución a raíz del escándalo de la ciudad sureña de Dongguan, donde la policía realizó una masiva redada la semana pasada después de que la televisión nacional denunciara el creciente ejercimiento de la prostitución en la urbe.
El ministerio de Seguridad Pública chino ha instado a todos los cuerpos de seguridad a "aprender la lección de Dongguan" y acabar con crímenes relacionados con la prostitución, el juego y las drogas por todo el país, según publicó el diario oficial "Global Times".
"Sé firme con la represión, sin importar quién esté envuelto, con independencia de qué cargo ocupen, sin indulgencia o tibieza", señala una nota publicada en la web del ministerio el domingo que, además, advierte de que cualquier oficial que eluda su deber tendrá "que rendir cuentas" y aquel que encubra a un delincuente "será castigado gravemente".
De momento, confirma el "Global Times", hasta ocho provincias más han iniciado campañas contra estos tres crímenes tras la masiva redada ocurrida en la metrópolis de Dongguan, ubicada en la provincia sureña de Cantón y uno de los focos industriales de China de donde proceden los productos exportados.
Entre ellas, se encuentran las provincias orientales de Jiangsu, Zhejiang y Shandong; la región de Heilongjiang, en el norte; Gansu, en el oeste, y Hunan, en el centro-sur de China.
Según publicó la prensa estatal, las autoridades desplegaron 200 policías en la ciudad de Rugao, en Jiangsu, para inspeccionar karaokes, y se llevaron a 100 sospechosos, mientras que en Leiyang, en Hunan, se detuvo a 79 personas y se cerraron 22 casinos y burdeles.
En Harbin, un punto de atracción turística en invierno por albergar la "ciudad del hielo", las autoridades desplegaron hasta 4.800 policías para registrar alrededor de 2.700 establecimientos.
Cerca de 6.500 efectivos de las fuerzas de seguridad chinas inspeccionaron una semana supuestas casas de lenocinio (entre ellas, hoteles y centros de masaje) en Donnguan, después de que la televisión nacional CCTV publicara un reportaje grabado con cámara oculta en el que se criticaba la rampante prostitución en la urbe.
La redada se saldó con 12 presuntos burdeles cerrados y 67 personas detenidas, además de con el despido del teniente de alcalde y jefe de la Policía Yan Xiaokang, mientras que otros diez oficiales de policía de alto rango fueron también despedidos o amonestados.
Críticas
Esta operación en Dongguan, bautizada como "la capital del sexo", suscitó las críticas entre la sociedad china, que consideró "hipócrita" y "cínica" la rápida actuación policial contra la consabida expansión de la prostitución en la metrópolis.
El caso además generó una inesperada campaña de apoyo a la ciudad así como a los trabajadores de la industria del sexo en el país, e incluso se pidió su legalización.
"No hay ninguna necesidad ni posibilidad de legalizar la industria del sexo", zanjó ayer el Diario del Pueblo, el periódico insignia del Partido Comunista.