En China se registran alrededor de 13 millones de abortos al año y casi la mitad de las mujeres que llevan a cabo esta práctica son menores de 25 años, mayoritariamente universitarias, informó este miércoles la prensa oficial, que cita datos del Gobierno.
La cifra anual, no obstante, podría ser mucho mayor, ya que los datos de la Comisión Nacional de Planificación Familiar y Sanidad no incluyen los abortos no registrados y ni siquiera mencionan los forzosos, derivados de la política gubernamental del hijo único.
Entre las adolescentes que tienen sexo prematrimonial, más del 20 por ciento se quedan embarazadas sin desearlo y el 91 por ciento de éstas deciden abortar.
Según la Comisión, cada vez más jóvenes chinas "se toman el asunto sin seriedad" como si el aborto fuera "asequible, seguro y no tuviera ningún impacto en el trabajo", una actitud incentivada por "los panfletos" de hospitales privados en los que se promete un proceso "sin dolor".
La prensa oficial considera que esta "elevada cifra" se debe a la falta de educación sexual.
Un estudio reciente evidenciaba que más del 68 por ciento de las mujeres chinas no sabían la diferencia entre anticonceptivos orales y la píldora del día después.
Los embarazos no deseados no son el único problema derivado de la falta de educación sexual en el país asiático, donde el 86 por ciento de los jóvenes no conocen métodos para prevenir infecciones de VIH, de acuerdo a otra reciente encuesta.
"Los padres y las escuelas deberían replantearse su actitud respecto a la enseñanza de los jóvenes en el mundo del sexo", sostiene el Diario del Pueblo.