China estudia retrasar o cancelar las negociaciones comerciales en la que iba a participar esta semana en Washington, después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, haya anunciado un nuevo aumento de aranceles a sus productos, informó hoy lunes el diario independiente South China Morning Post.
El diario, que cita fuentes oficiales, aseguró que el gobierno chino todavía no ha tomado la decisión, pero que es posible la cancelación de la cita en Washington, en la que presumiblemente iba a cerrarse un acuerdo para poner fin a la guerra comercial entre las dos grandes potencias económicas.
Estas declaraciones al diario hongkonés son la única respuesta hasta ahora de fuentes oficiales chinas a la decisión de Trump, quien este domingo anunció que su país aumentará el próximo viernes del 10 al 25 por ciento los aranceles sobre China en bienes de importación al considerar que las negociaciones entre ambas potencias van demasiado lentas.
El mandatario hizo este anuncio en mensajes en su cuenta personal de Twitter en los que dijo que "el acuerdo comercial con China continúa, pero demasiado lentamente".
China dice que su delegación viajará a EEUU, pero no especifica cuándo
La delegación de funcionarios chinos encargada de las negociaciones económicas con Estados Unidos viajará a Washington para continuar trabajando por alcanzar un acuerdo que ponga fin a la guerra comercial, aseguró hoy un portavoz del gobierno quien, sin embargo, no concretó la fecha.
En su rueda de prensa diaria, el portavoz de Exteriores, Geng Shuang, afirmó que la delegación -que estará encabezada por el viceprimer ministro chino, Liu He- "está preparando el viaje", aunque no precisó si este se producirá, como estaba previsto, el próximo miércoles.
A diferencia de otras ocasiones, el gigante asiático no respondió esta vez con medidas recíprocas y por el momento no ha habido ninguna respuesta oficial del Ministerio de Comercio, aunque Shuang se negó a hablar sobre un posible contraataque chino.
La semana pasada se celebró en Pekín otra ronda de negociaciones encabezada por el secretario del Tesoro estadounidense, Steven Mnuchin, quien declaró que las conversaciones habían sido muy "productivas", por lo que todo parecía indicar que tras el viaje a Washington de la delegación china encabezada por el viceprimer ministro chino, Liu He, iba a poder firmarse un acuerdo definitivo.
Trump advirtió a finales del año pasado de que, si no alcanzaba un acuerdo con China antes del 1 de marzo, elevaría del 10 por ciento actual al 25 por ciento los aranceles que aplica a las importaciones del gigante asiático por valor de 200.000 millones de dólares.
Sin embargo, finalmente optó por prorrogar este plazo para dar margen a las negociaciones que mantienen ambos países desde que el pasado 1 de diciembre, en el marco de la cumbre del G-20 en Buenos Aires, Trump y el presidente chino, Xi Jinping, acordaran una tregua para tratar de solucionar la guerra arancelaria que comenzó hace ya un año.
Desde diciembre, Pekín ha adoptado medidas de buena voluntad, como la bajada de aranceles a los vehículos importados de EEUU, la reanudación de la compra de soja o la presentación de un proyecto de ley para prohibir la transferencia forzada de tecnología.