El gobierno chino anunció que impondrá nuevas medidas arancelarias de 50 mil millones de dólares a productos estadounidenses, una medida en respuesta al último anuncio de reformas arancelarias anunciadas por el gobierno de Donald Trump a productos chinos.
El Consejo de Estado decidió imponer aranceles adicionales del 25 por ciento sobre 659 productos de los Estados Unidos, entre ellos vehículos y productos agrícolas, dos de los sectores más sensibles para el país norteamericano.
La noche del viernes el Ministerio de Comercio chino aseguró en un comunicado que, pese a no desear que se produzca una guerra comercial entre las dos potencias mundiales, responderá a EEUU de manera contundente e inmediata.
Las consecuencias para EEUU
A partir del 6 de julio, 545 artículos estadounidenses sufrirán el arancel por un valor total de 34 mil millones de dólares, entre ellos productos agrícolas, vehículos y productos acuáticos.
Los 114 productos restantes (productos químicos, equipos médicos y productos energéticos, entre otros) lo sufrirán en una fecha que "se anunciará más adelante".
La decisión se tomó "de acuerdo con las estipulaciones pertinentes" de la Ley de Comercio Exterior de China y el reglamento sobre los derechos de importación y exportación, así como "los principios fundamentales de las leyes internacionales", apuntó el comunicado.
Se acabó la calma
Las dos naciones enterraron así los acuerdos económicos alcanzados y se puso fin a la calma lograda en las últimas semanas tras las negociaciones entre las dos economías más fuertes del mundo.
"La medida estadounidense viola las reglas relevantes de la Organización Mundial del Comercio, va en contra del consenso alcanzado en consultas económicas y comerciales bilaterales, infringe gravemente los derechos e intereses legítimos del lado chino y socava los intereses de China y su pueblo", enfatizó la declaración de la Comisión de Aduanas.