Al menos sesenta tibetanos resultaron heridos por disparos de la policía durante una protesta en el este de esa región, informó la Radio Free Asia, aunque el Gobierno chino se negó a confirmar esa información.
De acuerdo con la emisora estadounidense, el suceso ocurrió el domingo en la localidad de Driru, donde una muchedumbre se congregó junto a la casa de un activista detenido previamente para intentar evitar que la policía registrara su domicilio.
El activista, Dorje Drakstel, había sido detenido en una manifestación anterior, organizada para protestar por la obligación de colgar banderas nacionales chinas en las puertas de las casas de los habitantes locales, con ocasión de la fiesta nacional china (1 de octubre).
En la protesta del domingo la policía abrió fuego y alcanzó a algunos de los manifestantes en manos o piernas, mientras que otros sufrieron heridas al caer inconscientes cuando la policía usó gases lacrimógenos para dispersarlos.
Testigos de las protestas aseguraron a Radio Free Asia que al menos dos de los heridos estaban en estado crítico y que la mayoría no había recibido atención médica.
La portavoz de la Cancillería china, Hua Chunying, declaró hoy en una rueda de prensa que carece de información sobre el incidente, por lo que "podría ser falso".
China asegura que el Tíbet es desde hace siglos parte de su territorio y en 1951 fue "liberada de la teocracia" del Dalai Lama, mientras que los tibetanos argumentan que la región fue durante mucho tiempo virtualmente independiente hasta que fue ocupada por las tropas comunistas en ese año.
Las tensiones en la región han aumentado desde las protestas organizadas en la capital tibetana, Lhasa, en marzo de 2008, en las que murieron una veintena de personas, y en los últimos dos años más de un centenar, en su mayoría monjes budistas, se han inmolado en protesta por la colonización china del "Techo del Mundo".