Tiene apenas 41 años e Iván Duque ya ha conseguido el gran hito de su carrera, renovar al uribismo, darle un nuevo y joven rostro para llevarlo una vez más al poder tras ganar las elecciones presidenciales de este domingo en Colombia.
Era un hombre desconocido hasta hace poco que se convirtió rápidamente en una estrella fulgurante del Centro Democrático en el Senado y en apenas cuatro años llegó a la Presidencia.
En la Cámara Alta se le vio frecuentemente a la sombra de Álvaro Uribe, ex presidente y mentor, una figura a cuyo lado creció la de Duque con discursos en los que atacó muchas de las medidas al Gobierno de Juan Manuel Santos y a la clase política tradicional.
Tampoco le tembló el pulso a la hora de criticar a las guerrillas, exigir mano dura con ellos y reiterar sus llamados en favor de la inversión nacional y extranjera, la innovación y el emprendimiento.
Duque se convierte ahora en el segundo jefe de Estado más joven de Colombia después de Alberto Lleras Camargo, quien asumió la Presidencia por primera vez a los 39 años por un corto periodo (1945-1946).
"Esperamos para pasar la paágina de la polarización"
Iván Duque dijo en su primer discurso que es necesario superar la fractura existente entre amigos y enemigos de la paz porque ese es un anhelo nacional y que trabajará para conseguirlo.
"Está de por medio la paz. La paz es un anhelo que implica que pasemos la página de esa fractura donde se nos quiso dividir entre amigos y enemigos de la paz; hoy somos todos amigos de construir la paz y debe ser una paz que ante todo preserve ese deseo de permitirle a la base guerrillera su desmovilización efectiva", afirmó.
El electo presidente dijo que llegará "a gobernar con todos y para todos con la mayor votación en la historia en nuestro país".
Duque agradeció a su esposa, sus hijos y su madre "por el tiempo que me brindaron, por su respaldo, y porque espero que esta sea una familia que le de ejemplo y que trabaje todos los días por el pueblo colombiano".
"Esta elección es la que esperamos para pasar la página de la polarización la página de los agravios, la página de las ponzoñas. Yo no reconozco enemigos en Colombia, no voy a gobernar con odios ni mantengo odios contra ningún colombiano, no existen en mi mente ni en mi corazón venganzas ni represalias, se trata de mirar hacia el futuro por el bien de todos los colombianos", sentenció.
"Nosotros lo que le hemos dicho a Colombia es que no vamos a hacer trizas los acuerdos, sino que la paz sea para todos los colombianos", resaltó.