El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó este miércoles que la protección de los estadounidenses dentro y fuera del país constituye la máxima prioridad de seguridad nacional de su Gobierno, en la víspera del duodécimo aniversario de los atentados contra el Pentágono y las Torres Gemelas.
Según indicó la Casa Blanca en un comunicado, Obama se reunió con funcionarios clave de su equipo de seguridad nacional para analizar las medidas de seguridad en vísperas de otro aniversario de los atentados que se cobraron la vida de 3.000 personas en 2001.
En la reunión, el mandatario estadounidense "reiteró que la protección del pueblo estadounidense, tanto en casa como en el exterior, es la máxima prioridad de seguridad nacional de la Administración", añade el comunicado.
El ataque del 11 de septiembre de 2012 contra el consulado estadounidense en la ciudad libia de Bengasi, en el que fallecieron cuatro diplomáticos, entre estos el embajador Chris Stevens, puso de relieve "la realidad de los retos que afrontamos en el mundo", dijo la Casa Blanca.
"Al acercarnos a este día de recordación, continuamos de luto por la muerte de nuestros queridos colegas y honramos su dedicación al servicio público. Mantenemos el compromiso de llevar ante la Justicia a los responsables de los ataques en Bengasi y asegurar la seguridad de nuestro valiente personal que ofrece servicio en el exterior", indicó.
Por otra parte, la Casa Blanca señaló que en los últimos meses, la asistente del presidente Obama para asuntos antiterroristas y de seguridad nacional, Lisa Monaco, ha llevado a cabo numerosas reuniones para revisar las medidas de seguridad de cara al aniversario del 11-S.
En esas reuniones también se han analizado otras "amenazas globales", incluyendo la reciente amenaza proveniente de la península arábiga, agregó la nota.