Sólo podrá detenerse a los sospechosos tras una evaluación "concienzuda" de pruebas.
Los residentes de EE.UU. no podrán ser puestos bajo custodia militar.
El presidente estadounidense, Barack Obama, estableció excepciones que reducirán los supuestos de detención y procesamiento ante la justicia militar de extranjeros sospechosos de ser terroristas de Al Qaeda.
Así, quienes tengan residencia permanente en Estados Unidos no pueden ser puestos bajo custodia militar por colaborar con Al Qaeda, mientras que en el caso de extranjeros sólo podrá realizarse tras una evaluación de las pruebas en su contra.
Otra de las excepciones se contempla para casos en los que la transferencia a custodia militar pueda reducir las posibilidades de obtener un confesión o cooperación en la investigación.
Según la directiva de Obama el incumplimiento de estas excepciones podría "minar los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos, comprometer la capacidad de reunir inteligencia y para incapacitar a individuos peligrosos".
Los sospechosos de pertenecer a Al Qaeda sólo podrán ser transferidos de la custodia civil a la militar tras una "concienzuda evaluación de todos los hechos relevantes, basados en la opinión del equipo de altos mandos de seguridad nacional del presidente".
Asimismo, la directiva presidencial entregó poderes al Fiscal General para que aplique nuevas excepciones caso por caso para la detención y custodia militar de sospechosos.
