El Tribunal Supremo de Estados Unidos se posicionó a favor de un pastelero que se negó a servir a una pareja homosexual que le había encargado su torta de matrimonio alegando motivos religiosos, publicaron este lunes medios locales.
El caso, conocido como Masterpiece Cakeshop vs Colorado, data del año 2012, cuando la pareja compuesta por Dave Mullins y Charlie Craig ingresó a la pastelería de Jack Phillips para encargar una torta para su matrimonio.
Al ser consultado por sus servicios, Phillips se negó a atender a la pareja, afirmando que "no utilizaría sus talentos para condonar un mensaje que apoye el matrimonio igualitario debido a sus creencias religiosas".
La pareja afirmó sentirse discriminada y presentó una queja ante el Estado de Colorado, la cual fue aceptada ya que se concluyó que la libertad de expresión del pastelero no le permitía negarle el servicio a clientes sin siquiera discutir el diseño de la torta en cuestión, argumento rechazado por Phillips y llevado a la Justicia.
En una sorpresiva decisión, este lunes la Corte Suprema respaldó por una mayoría de siete de los nueve jueces de la sala la actuación del repostero, argumentando que "el trato de la Comisión de Derechos Civiles tiene elementos claros e impermisibles de hostilidad contra las sinceras creencias religiosas que motivaron la decisión (del pastelero)", afirmaron los jueces de la corte en la sentencia.
El caso puede sentar un precedente en situaciones similares en los que se discute la discriminación por orientación sexual y en los que quienes supuestamente la ejercen tienden a argumentar razones relativas a sus creencias.