El Gobierno del presidente saliente de EE.UU., Donald Trump, golpeó con sanciones a miembros de una red supuestamente liderada por el empresario colombiano Alex Saab y cuyo objetivo era comercializar crudo venezolano evadiendo las penalizaciones que Washington impuso a la petrolera estatal PDVSA en 2019.
A un día que Trump abandone la Casa Blanca, su Administración, que sancionó por primera vez a esa red en junio de 2020, decidió actualizarlas e impuso restricciones económicas a tres individuos, 14 entidades y 6 barcos, indicó el Departamento del Tesoro.
Según el Gobierno, esta red criminal estaba dirigida por el vicepresidente económico de Venezuela, Tareck El Aissami, y el empresario colombiano Alex Saab, supuesto testaferro del presidente venezolano Nicolás Maduro y que se encuentra preso en Cabo Verde a la espera de ser extraditado a EE.UU., acusado de blanqueo de dinero.
"Aquellos que facilitan los intentos del régimen ilegítimo de Maduro de eludir las sanciones de EE.UU. contribuyen a la corrupción que consume Venezuela", afirmó el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
Entre los sancionados figura el italiano Alessandro Bazzoni, quien supuestamente se encargaba de conectar a otras dos compañías sancionadas: Elemento, con sede en Malta y que fue comprada por Pdvsa, y Swissoil, con sede en Suiza y que se encargaba de transportar crudo venezolano al mercado asiático.
También ha sido sancionado el ciudadano español-venezolano Francisco Javier D'Agostino Casado, quien trabajó con Saab, Leal y Bazzoni para coordinar la compra y venta de crudo en nombre de Pdvsa, además del suizo Philipp Paul Vartan Apikian, propietario y director de Swissoil, quien, según EE.UU., ha estado implicado en la venta y transporte de petróleo de Venezuela.
Como resultado de esta acción, todas las propiedades y activos que estos individuos o empresas puedan tener en EE.UU. o estén en posesión de estadounidenses quedan bloqueados y se prohíbe cualquier transacción de ciudadanos de EE.UU. con ellos.