La vicepresidenta del gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó que tienen "absolutamente controlada" la situación en Cataluña.
La autoridad española aseguró este martes que su Gabinete tiene preparadas todas las actuaciones para evitar que se siga "pisoteando" la libertad en Cataluña y para evitar los "comportamientos mafiosos" que a su juicio tienen lugar.
Las palabras de la vicepresidenta se producen dos días después del referéndum secesionista "ilegal" en la región de Cataluña, con gran tensión, y mientras hoy se registra un paro en esa comunidad con el que sus impulsores quieren criticar la actuación policial.
Sáenz de Santamaría, en declaraciones a los periodistas tras participar en un acto público, dijo que el Ejecutivo está hablando con los diversos partidos sobre esas medidas.
Al plantearle si entre esas actuaciones se encuentra el artículo 155 de la Constitución, que prevé que el gobierno central pueda intervenir la región y sustituir a los cargos públicos regionales, Sáenz de Santamaría afirmó que se trabaja en medidas que protejan al pueblo de Cataluña.
A su juicio, lo que más se está vulnerando con el comportamiento "antidemocrático, de coacción y de amenaza" del gobierno regional es el interés general de los catalanes.
Miles de personas protestan por actuar policial
En el marco de la jornada de paralización, miles de personas salieron este martes a las calles en Barcelona y en otras ciudades de Cataluña para protestar contra la actuación de la Policía española y la Guardia Civil durante el referéndum independentista.
Según el gobierno de Cataluña -que ha permitido a los funcionarios seguir este paro-, la huelga está teniendo una participación "masiva".
En las concentraciones de hoy destacan las marchas de Barcelona, donde unas 300.000 personas -según la Guardia Urbana de la capital-, se manifestaron en distintas calles del centro de la ciudad en protesta por la intervención policial el 1 de octubre.
Esta protesta se unió con otra congregación de unas 2.000 personas ante la Jefatura de la Policía Nacional en Barcelona, custodiada por la Policía regional de Cataluña (Mossos d'Esquadra), y juntos iniciaron una marcha que se dirigió al Parlamento catalán, mientras se desarrollaba otra concentración ante el Palacio de la Generalitat (sede del Gobierno catalán).
Frente al Parlamento regional se situaron decenas de bomberos uniformados en primera línea, mientras detrás suyo iban llegando manifestantes procedentes de distintos puntos de la ciudad.
Esos concentrados cantaron el himno catalán, "Els Segadors", y han coreado lemas como "Independencia" o "Viva Cataluña libre".