La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ofreció este domingo esa ciudad española "como puerto seguro" para acoger al millar de imigrantes que, según la ONG Proactiva Open Arms, navegan a la deriva en el Mediterráneo.
La ONG denunció hoy que las autoridades italianas han dado orden de no intervenir en los rescates bajo el argumento de que se va a encargar la Guardia Costera de Libia.
"Ahora mismo más de 1.000 personas a la deriva en 7 barcas e Italia pretende dejarlas en manos de Libia, donde se tortura, viola y esclaviza a las personas", señala la alcaldesa de Barcelona en su cuenta de Twitter.
En el mismo mensaje, Colau hace una apelación directa al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y a la vicepresidenta y ministra de Igualdad, Carmen Calvo, para que "ayuden a Open Arms a salvar vidas" y concluye: "Barcelona se ofrece como puerto seguro".
Italia ha emprendido una cruzada para frenar los flujos migratorios hacia el país y el ministro del Interior y líder de la ultraderechista Liga, Matteo Salvini, ha declarado que prohibirá llegar a los buques de ONG con migrantes socorridos en el mar.
Ya lo hizo hace unas semanas con el barco Aquarius, de las ONG SOS Méditerranée y Médicos Sin Fronteras, que se vio obligado a desembarcar en España con 630 personas a bordo, después de que Italia y Malta se lo prohibieron.