El presidente Boris Tadic sostuvo que su país usará todos los medios diplomáticos para impedir la separación de la provincia habitada mayormente por personas de origen albanés.
Serbia pedirá a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya su opinión sobre la legalidad de una eventual independencia de Kosovo, en otro intento de mantener la provincia dentro de sus fronteras, informó este martes la televisión pública RTS en Belgrado.
El presidente serbio, Boris Tadic, indicó en unas declaraciones emitidas este martes por RTS que lanzará esta iniciativa a través del Consejo de Seguridad de la ONU, que prevé reunirse la semana próxima para decidir sobre el destino de Kosovo.
"Debemos emprender toda una serie de actos jurídicos y legales, y si tenemos éxito con la iniciativa ante la CIJ creo que sería un argumento importante para que el Consejo de Seguridad no se incline hacia la independencia de Kosovo", declaró Tadic.
El Consejo de Seguridad se reunirá para debatir el informe de la "troika" de mediadores de la Unión Europea, EEUU y Rusia, que auspició en los últimos cuatro meses las negociaciones entre serbios y albaneses, y que finalizó el lunes sin resultados.
"Debemos preservar la calma para todas las circunstancias que nos esperan", declaró Tadic.
Indicó que Serbia usará todos los medios diplomáticos para "impedir la independencia de Kosovo y ganarse aliados en ese proceso", y agregó que "todo eso lo debemos hacer de una forma pacífica y bien planeada".
Los líderes de los albaneses, que son el 90 por ciento de la población de Kosovo, anunciaron que proclamarán en breve la independencia, pero prometieron que lo harán de forma coordinada con Estados Unidos y la UE.
Serbia dejó claro que no quiere renunciar a su provincia e intenta, con el apoyo de Rusia, conseguir que prosigan las negociaciones hasta que se halle una solución que sea aceptable para ambas partes.
Belgrado insiste en que el asunto sea decidido por el Consejo de Seguridad de la ONU, y asegura que la independencia unilateral podría desestabilizar los Balcanes y otros focos separatistas en el mundo. (EFE)
