Al menos 49 muertos dejan los graves incendios forestales que han arrasado desde ayer lunes la costa al noreste de Atenas (Grecia), mientras que los heridos son 172, según el último balance de Protección Civil, que ha advertido que puede haber más víctimas mortales.
Según el servicio de emergencias, 11 de las personas heridas se encuentran en estado crítico y se teme que el número de víctimas mortales aún sea mayor, ya que se están recibiendo numerosas llamadas de personas que avisan de familiares desaparecidos.
Todas las víctimas han sido halladas en el área comprendida entre el puerto de Rafina, a unos 30 kilómetros de Atenas, y Nea Makri, situada unos 10 kilómetros más al norte.
La mayoría de las personas fallecidas quedaron atrapadas por las llamas en sus casas o en sus automóviles, o intentaron huir del fuego echándose al mar, pero acabaron ahogándose.
Un portavoz de Cruz Roja señaló en declaraciones a la cadena pública de televisión ERT que tras haber hallado 24 muertos en distintos puntos de la zona, los bomberos han encontrado esta mañana un grupo de 26 fallecidos en un campo situado en la pequeña localidad de Mati, en el área mencionado.
Según el servicio de bomberos, actualmente todavía hay tres incendios en curso en la región capitalina de Atica, pero también hay grandes frentes en otras regiones del país, particularmente en la zona de Corinto, en el Peloponeso, así como en la isla de Creta.
Las tareas de extinción continuaron durante toda la noche pero se vieron dificultadas por los fuertes vientos que alcanzaron fuerza siete en la escala de Beaufort.
Después de que las autoridades declararan el estado de emergencia y solicitaran ayuda internacional, el portavoz del Gobierno, Dimitris Tzanakópulos, anunció que hoy martes llegarán aviones de extinción desde España, así como voluntarios de Chipre.
En estos momentos en los tres principales frentes -el este de Atica, la zona de Kineta, en el oeste de esa región, así como en Corinto y Creta hay desplegados seis helicópteros y tres aviones, así como centenares de bomberos con medios terrestres.
Según informó el alcalde de Rafina, Evánguelos Burnús, al menos 500 casas y 200 vehículos han sido dañados en mayor o menor medida por las llamas.
Burnús señaló en declaraciones a ERT que la operación de evacuación por mar emprendida ayer continúa y los barcos de la Guardia Costera siguen desplazando a numerosos residentes de Rafina hacia otras zonas seguras.