El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, usó este martes por primera vez la palabra "genocidio" para describir la guerra en Ucrania.
El mandatario hizo ese comentario cuando estaba hablando de los esfuerzos de su gobierno para frenar el aumento de los precios de la gasolina como resultado de la invasión lanzada por el presidente ruso, Vladímir Putin, contra los ucranianos.
"Estoy haciendo todo lo que está en mi poder con órdenes ejecutivas para reducir los precios y hacer frente a esa alza de precios provocada por Putin", dijo Biden en un acto en el estado agrícola de Iowa.
"El presupuesto de sus familias, su habilidad para llenar el tanque, nada de eso debería depender de si un dictador declara la guerra y comete un genocidio en el otro lado del mundo", añadió el mandatario en referencia a Putin y a Ucrania.
Biden ha arremetido en las últimas semanas contra el líder ruso, al que ha llegado a calificar de "carnicero", y ha acusado al Kremlin de cometer crímenes de guerra en su ofensiva militar.
La prensa preguntó la semana pasada a Biden si calificaría como genocidio la masacre de Bucha, a las afueras de Kiev y donde han aparecido más de 250 cadáveres de civiles tras la retirada de las tropas rusas.
"No, creo que es un crimen de guerra", contestó entonces el presidente.
Dentro del Gobierno estadounidense existe un proceso burocrático para determinar si se está cometiendo genocidio en un país y no está claro si ese proceso ha concluido o está teniendo lugar.
EEUU EVALÚA SUPUESTO ATAQUE QUÍMICO EN MARIÚPOL QUE SIGUE SIN PODER CONFIRMAR
En tanto, Estados Unidos continúa evaluando el supuesto ataque químico contra la ciudad portuaria de Mariúpol, en Ucrania, que aún no ha podido confirmar, dijo este martes un funcionario de alto rango del Departamento de Defensa.
"Estamos todavía monitoreando esas informaciones, pero no podemos confirmar el uso de agentes químicos en este momento, todavía estamos evaluando", remarcó la fuente, sin ofrecer más detalles, en una llamada con periodistas.
El funcionario estadounidense hizo hincapié en que este tipo de ataques son complicados de probar, incluso cuando se está sobre el terreno, y recordó que EE.UU. no está desplegado en Ucrania.
"Entiendan que queremos ser muy cuidadosos aquí antes de hacer una afirmación, sabemos que los rusos tienen un historial de uso de agentes químicos y han mostrado una propensión en el pasado (a utilizarlos), por lo que nos lo tomamos muy en serio", apuntó.
Más tarde, el portavoz del Departamento de Defensa de EE.UU., John Kirby, agregó en una rueda de prensa que, de acuerdo con los datos de inteligencia de que disponen, no descartan que Rusia pueda intentar enmascarar un posible ataque químico con el uso de material antidisturbios, como gas lacrimógeno.
Subrayó que, pese a no poder confirmar el uso de sustancias químicas en Mariúpol, "los rusos han demostrado, ciertamente, que están más que dispuestos a emplear armas químicas cuando les ha convenido en el pasado".
Kirby dijo el lunes en un comunicado que estaban "al tanto" de las informaciones en las redes sociales sobre el uso potencial de armas químicas en Mariúpol.
DIVERSAS VERSIONES SOBRE PRESUNTO ATAQUE QUÍMICO
El portavoz hizo estas declaraciones después de que el fundador del regimiento "Azov" de Ucrania, Andréi Biletsky, acusara en un mensaje en Telegram a las tropas rusas de utilizar una sustancia química en Mariúpol y herir a tres personas.
En su mensaje, Biletsky denunció que Rusia usó una sustancia venenosa de origen desconocido que fue arrojada desde un dron sobre la planta de Azovstal en Mariúpol, donde tres personas resultaron heridas.
La milicia separatista de Donetsk negó este martes haber utilizado armas químicas para asaltar la planta de Azovstal en la asediada ciudad portuaria de Mariúpol, donde están pertrechados los defensores ucranianos.
El portavoz de esa milicia, Eduard Basurin, señaló a la agencia rusa Interfax que "las fuerzas de la república popular de Donetsk no utilizaron ningúna arma química en Mariúpol".