El ayuntamiento de Holanda estudia subir la edad mínima para ejercer la prostitución de los 18 a los 21 años para proteger a las jóvenes, mayoritariamente del Este de Europa, que son forzadas a ejercer esta profesión en la capital holandesa bajo el yugo de mafias internacionales.
Además de elevar la edad mínima, el consistorio también quiere introducir un examen de idioma para las prostitutas.
"Un test de idioma no es solo importante para que la chica pueda hablar con la policía y los asistentes sociales, también para cuidar de ella misma en una situación de emergencia", señalaron fuentes del ayuntamiento de Amsterdam citadas por el diario neerlandés Parool.
El ayuntamiento está dispuesto a aprobar a nivel local la medida dado que el plan nacional para la regulación de la prostitución avanza muy lentamente.
El alcalde de la capital, Eberhard van der Laan, urgió al ministro de Justicia, Ivo Opstelten, a que haga lo posible porque se apruebe una iniciativa que está siendo discutida por el Parlamento para que exista un registro de trabajadores del sexo que ayude a acabar con la prostitución forzosa.
Según las estimaciones del consistorio de Amsterdam, en la ciudad hay entre 5.000 y 8.000 trabajadores del sexo, un 90 por ciento de los cuales son mujeres.
La prostitución se legalizó en Holanda en 2000 pero ello no ha resuelto, según los expertos, los problemas de explotación sexual.