Juez pospuso hasta el domingo reinicio del juicio a Sadam
La ausencia de algunos testigos, que aún no han regresado de su peregrinación a La Meca, impidió que este martes continuara el proceso contra el depuesto presidente iraquí.
La ausencia de algunos testigos, que aún no han regresado de su peregrinación a La Meca, impidió que este martes continuara el proceso contra el depuesto presidente iraquí.
La octava vista del juicio contra el ex presidente iraquí Sadam Husein y siete de sus colaboradores, que debía haberse celebrado este martes fue pospuesta hasta el domingo 29 de enero, informó el juez Raid Yuhi, jefe investigador del tribunal.
El magistrado explicó que la sesión no se pudo iniciar porque algunos de los testigos citados no se presentaron al encontrarse en Arabia Saudí, país del que no han regresado aún tras realizar la peregrinación anual musulmana a La Meca.
"Algunos de los testigos se encuentran en el exterior del país, así que el Tribunal ha decido retrasar la sesión hasta el próximo domingo 29", dijo el togado a los periodistas que esperaban en el interior de la zona verde, el recinto amurallado de Bagdad.
El aplazamiento agrega nuevas dudas sobre el futuro del proceso, ya bastante dañado por la renuncia días atrás del juez que lo presidía, el kurdo Ritzak Mohamed Amin, quien denunció presiones del entorno.
El juicio, que arrancó el 19 de octubre de 2005, debía haberse retomado la mañana de este martes tras estar un mes suspendido.
Estaba previsto que la sesión fuera presidida por el también kurdo, Rauf Rashid Abdel Rahman, designado la noche del lunes 23 de enero como sustituto de Amin.
Husein y siete de sus colaboradores son juzgados por la matanza de 148 chiitas en 1982 en la aldea de Djauil en supuesta represalia por un fallido intento de asesinato sufrido por el tirano al atravesar la citada población.
En las siete vistas celebradas hasta la fecha, varios testigos han relatado torturas en las cárceles de Sadam, pero ninguno de ellos ha podido implicar de forma directa a los encausados.
El dictador incluso dio la vuelta a la causa al denunciar, en una de las últimas vistas, que había sido golpeado y torturado por las tropas estadounidenses durante su presidio, y asegurar que las marcas eran visibles en su cuerpo.
La defensa, por su parte, ha seguido con la línea emprendida de no reconocer la legitimidad de la corte y se esperaba que este martes volviera a pedir la suspensión por la falta de medidas de seguridad. (EFE)