Los ministros de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, y de Japón, Fumio Kishida, celebraron este sábado un encuentro en Pekín, el primero a nivel ministerial que ambos países mantienen tras dos años de tensiones bilaterales.
Los cancilleres de ambos países no se reunían desde septiembre de 2012, cuando Japón nacionalizó tres islotes del archipiélago Diaoyu/Senkaku, reclamado por China, lo que dio inicio a 24 meses de parálisis de los lazos políticos y diplomáticos bilaterales.
La agencia oficial Xinhua informó brevemente del encuentro, ocurrido al margen del Foro de Cooperación Asia-Pacífico (APEC).
Los medios japoneses destacaron que en la reunión Kishida intentó desbloquear las reticencias chinas a un encuentro bilateral a nivel aún mayor, entre el presidente chino, Xi Jinping, y el primer ministro nipón, Shinzo Abe, quien asistirá a la cumbre de líderes del APEC los próximos días 10 y 11 de noviembre.
El encuentro de hoy, en todo caso, confirma cierto deshielo en los lazos que ya anunciaron ayer los dos gobiernos ayer cuando se reunieron el consejero de Estado chino Yang Jiechi, y el consejero de Seguridad Nacional japonés Shotaro Yachi.
En esa reunión ambos reconocieron "diferencias" en diversos aspectos de la política bilateral, pero se comprometieron a trabajar para que esas divergencias "no se conviertan en obstáculos políticos o en un inesperado conflicto mayor".
China y Japón también chocaron con frecuencia en los últimos meses por las visitas y homenajes de Abe al santuario Yasukuni, un templo sintoísta de Tokio que rinde homenaje, entre otros, a criminales de guerra de la Segunda Guerra Mundial, cuando el Ejército nipón invadió buena parte del territorio chino.
EE.UU. "da la bienvenida a esta iniciativa"
El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, también estos días en Pekín con ocasión de las reuniones del APEC, celebró en rueda de prensa los gestos de reconciliación entre las dos potencias asiáticas.
Kerry declaró en la capital china, tras reunirse por separado con los dos cancilleres anoche, que EE.UU. "da la bienvenida a esta iniciativa", ya que "cualquier paso que los dos países pueden tomar para reducir tensiones ayuda no sólo les ayuda a ellos, sino también a la región".
"Es totalmente adecuado que esta discusión tenga lugar en APEC, que no es sólo un lugar para discutir ideas económicas", añadió el jefe de la diplomacia estadounidense, quien aseguró que "el funcionamiento de la economía requiere estabilidad y un proceso pacifico de los asuntos de seguridad".