Nueve japoneses murieron en posibles suicidios colectivos
Las autoridades sospechan que los siete jóvenes que cometieron la primera de las dos inmolaciones conocidas este lunes en Japón se conocieron a través de internet.
Las autoridades sospechan que los siete jóvenes que cometieron la primera de las dos inmolaciones conocidas este lunes en Japón se conocieron a través de internet.
La policía de la provincia de Saitama, al norte de Tokio, halló este martes dentro de un automóvil los cuerpos sin vida de siete jóvenes, quienes, según los primeros indicios, murieron debido a la aspiración de monóxido de carbono, en lo que la autoridad estima que es el mayor suicidio colectivo en la historia de Japón.
Dentro del vehículo había una parrilla portátil que había sido utilizada para quemar carbón. La combustión produjo el monóxido de carbono que acabó con la vida de los jóvenes, cuatro hombres y tres mujeres, adolescentes y veinteañeros.
Más tarde, dos mujeres fueron encontradas muertas en un automóvil estacionado ante un templo aislado en Yokosuka, 100 kilómetros al sureste, también con estufas de carbón y las ventanas selladas, dijo el vocero de la prefectura de Kanagawa.
El primer hallazgo se produjo a primera hora de la mañana de este lunes, en una zona boscosa que la policía rastreaba en busca del grupo de jóvenes, después que uno de ellos enviara la noche del lunes un correo electrónico a un amigo en el que le comunicaba su intención de suicidarse.
Según indicó la policía, citada por la agencia de noticias Kyodo, el automóvil, que había sido alquilado en Tokio, estaba en un estacionamiento de un parque natural de la localidad de Minamo, en la ladera de una de las montañas de Saitama.
"Creemos que todos murieron luego de inhalar monóxido de carbono proveniente del carbón", expresó un vocero de la policía sobre los siete muertos en Saitama. "Pensamos que se conocieron a través de internet", agregó.
"No encontramos ningún indicio de violencia que de otra manera pudiera haber llevado a sus muertes", agregó.
Los investigadores deben establecer aún si los dos casos estaban relacionados.
Recientemente Japón ha visto una ola de suicidios acordados a través de internet entre gente que busca compañía para morir.
Tales acciones, que se han hecho más comunes desde al menos la década de 1990, han cobrado la vida de decenas de personas y causado conmoción en Japón, donde de por sí la cifra de suicidios es alta.
Más de 34.000 japoneses se quitaron la vida en 2003, según la Agencia Nacional de Policía, un aumento de más de siete por ciento respecto de 2002. (Agencias)