El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió este lunes que Israel tratará "con mano dura" al movimiento islamista palestino Hamás tras el aumento de la tensión en torno a Gaza y cerró el paso de Kerem Shalom, el único para mercancías que comunica este país y la Franja.
El cruce al enclave costero, bajo bloqueo israelí desde 2007, permanecerá abierto para recibir material humanitario, incluidas medicinas y alimentos pero "no habrá exportaciones ni comercio desde la Franja de Gaza".
Esto, "debido a los constantes incendios provocados y otros intentos de terrorismo adicionales liderados por la organización terrorista Hamás, que explota y pone en peligro a los residentes de Gaza", informó el Ejército israelí.
Además, el perímetro de pesca permitido, que había sido ampliado a las nueve millas náuticas durante la temporada alta de pesca, será reducido de nuevo desde hoy a las seis habituales, "y no se ampliará".
"El Estado de Israel aspira y actúa para mejorar la realidad humanitaria de la Franja de Gaza. Sin embargo, a la luz de la situación (...), Israel decidió tomar estas medidas", se indica en la nota.
En la misma, asevera que las medidas "persisten y se intensificarán" si continúan las mismas condiciones y responsabiliza a Hamás, que gobierna de facto el enclave, de "las actividades en la Franja de Gaza y sus consecuencias".