A lo largo del fin de semana, Israel ha bombardeado las inmediaciones de tres hospitales de Gaza, entre ellos el más importante de la Franja, el de Shifa, en los que hay miles de pacientes y desplazados internos, advirtió hoy Naciones Unidas.
En su informe diario sobre la situación en Gaza, que ha podido actualizar gracias al retorno de las telecomunicaciones en el territorio el domingo, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU indicó que ha habido ataques a los centros médicos de Shifa, el Al Quds (ambos en la capital gazatí) y en el Hospital Indonesio, en la zona norte del territorio palestino.
"Los 10 hospitales aún operativos en la ciudad de Gaza y en el norte han recibido repetidas órdenes de evacuación en los últimos días", indicó Naciones Unidas, que señaló que en esas instalaciones se refugian unos 117.000 desplazados internos, junto a los miles de pacientes.
El informe recordó el llamado de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a suspender esas órdenes de evacuación, ya que en opinión de la agencia sanitaria "es imposible evacuar a los pacientes sin poner en riesgo sus vidas".
"EL ORDEN CIVIL SE ESTÁ ROMPIENDO"
Otro asunto de preocupación destacado en el informe diario es el asalto, el sábado 28 de octubre, de varios almacenes de ayuda humanitaria de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), señal según Naciones Unidas de que "el orden civil se está rompiendo tras semanas de guerra y duro asedio".
Con todo, el domingo se consiguió un aumento en el número de camiones con ayuda humanitaria autorizados a entrar en Gaza por el paso de Rafah, hasta 33, con lo que el total desde el inicio de estas entradas el 21 de octubre se eleva a 117, de los que unos 70 llevaron suministros médicos.
En las últimas 24 horas, la ONU indicó, citando cifras del Ministerio de Salud en Gaza, que murieron en la Franja 302 palestinos, por lo que los fallecidos desde el inicio de las hostilidades el 7 de octubre se elevó a 8.005, entre ellos 3.324 niños y 2.062 mujeres, con 1,4 millones de desplazados internos.
En Cisjordania, la muerte de otros cuatro palestinos en las últimas 24 horas elevó la cifra de víctimas por parte de fuerzas de seguridad y colonos israelíes en las últimas tres semanas a 115, incluidos 33 niños, mientras que unas mil personas se han visto obligadas a dejar sus hogares.
En Gaza "los ataques aéreos parecen estar destruyendo de forma sistemática áreas residenciales enteras", denuncia el informe de Naciones Unidas, que citó bombardeos como el que en Jabalia (norte de Gaza) causó 26 muertos el domingo, dejando otras 14 personas enterradas entre los escombros.
En un entorno donde ya no se interpreta que el sur de Gaza sea más seguro que el norte, "los desplazados internos se mueven de unas zonas a otras basándose en la posibilidad de lograr agua y alimentos", indicó el informe de la ONU.