El ministro israelí de Defensa, Amir Peretz, afirmó este jueves que su país no tiene intención de incrementar la tensión en la frontera con el Líbano, tras el intercambio de fuego registrado el pasado miércoles entre los Ejércitos de ambos países.
"No tenemos intenciones de que se produzca una escalada, pero en cualquier situación en la que haya fuego que ponga en peligro a fuerzas del Ejército israelí deberemos responder", afirmó Peretz durante una reunión con altos mandos de la seguridad, donde se analizó el incidente.
El titular de Defensa añadió que "las fuerzas de la Fuerza Interina de las Naciones Unidas en el Líbano (Finul) y del Ejército libanés están cumpliendo sus funciones, y nosotros pretendemos continuar operando conforme a las regulaciones políticas establecidas en los últimos meses".
Según Peretz, "la Comandancia Norte ha operado en concordancia con las regulaciones y de la manera correcta y necesaria".
Las operaciones, agregó, cumplen con la resolución 1.701 del Consejo de Seguridad de la ONU, donde ambas partes acordaron poner fin a las hostilidades y aceptar el refuerzo de la fuerza internacional y el despliegue de Ejército libanés.
El tiroteo del pasado miércoles comenzó cuando un tanque del Ejército israelí disparó dos ráfagas de fuego contra posiciones del Ejército libanés -contra un puesto de observación y un vehículo blindado- en respuesta a los disparos desde el territorio libanés contra tropas israelíes. (EFE)