El líder del grupo chií libanés Hizbulá, Hasán Nasralá, confirmó este viernes el alto el fuego alcanzado el pasado día 24 entre el régimen del presidente sirio, Bachar al Asad, y facciones opositoras para pacificar las poblaciones disputadas de Fua, Kefraya y Al Zabadani, en el territorio de Siria.
En una entrevista para la televisión libanesa Al Manar, el dirigente del grupo chií libanés, aliado de Al Asad en el conflicto sirio, señaló que podían "haber liberado Al Zabadani en 16 días", pero que quisieron "proteger a la población".
"Aseguro a la gente asediada de Fua y Kefraya que el régimen nunca ha considerado abandonarles", añadió.
Añadió que la tregua fue alcanzada a cambio de la "evacuación de los combatientes y heridos" de Al Zabadani y de "10.000 civiles de las aldeas de Fuad y Kefraya hacia las zonas controladas por el régimen.
Fua y Kefraya son dos pueblos de mayoría chií ubicados en Idleb, que está controlada casi totalmente por el Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda, y otras facciones.
Al Zabadani, cercana a la frontera con el Líbano, es desde comienzos de julio escenario de una ofensiva conjunta del régimen sirio y Hizbulá, que quieren expulsar de allí a los opositores.
Las partes llevan negociando desde hace meses para poner fin a las hostilidades en estas zonas, donde en el pasado se acordaron varios alto el fuego, el último, ayer, según informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Asimismo, Nasralá señáló que el apoyo de Rusia al régimen de Al Asad no se ha completado todavía y precisó que "existe un número significativo de aviones, misiles y ametralladoras listos para ser enviados a Siria".
Asimismo, destacó que Moscú ya ha informado a Damasco que está "preparado para enviar fuerzas a Siria, aunque este todavía no se lo ha pedido, pero puede que lo haga pronto".
También subrayó que Rusia está formando una alianza que incluirá a Irán, Turquía, Irak y los que están combatiendo contra los yihadistas, en alusión a su grupo y a Estados Unidos.
Además, destacó que a pesar de algo más de cuatro años de una "guerra global para derrocar al régimen sirio", este pudo resistir gracias al apoyo de sus aliados.
"La firmeza de Siria y de sus aliados a pesar de las presiones fue la razón principal de lo que alcanzamos (en el conflicto). Hoy somos testigos del fracaso de la estrategia estadounidense", añadió.
Según Nasralá, "varios elementos contribuyeron al fracaso de la guerra contra Siria, entre ellos la intervención de Rusia, que desde el comienzo estuvo siempre junto a ese país y lo apoyó con material y medios necesarios".
Por otra parte, el líder de Hizbulá pidió a Arabia Saudí que permita que los países que contaron con más víctimas en la tragedia de ayer sucedida en la ciudad santa saudí de La Meca participen en la investigación.
Nasralá reclamó "la participación de representantes de los países que tuvieron el mayor número de víctimas en el comité de investigación sobre lo sucedido en la peregrinación".
"Después de su fracaso, Arabia Saudí debe dejar que la gestión del peregrinaje sea llevada por el conjunto de los países musulmanes o por lo menos dejar que un comité musulmán supervise la peregrinación", añadió.
Asimismo, resaltó que las autoridades de Riad, de confesión suní, "deben asumir la mayor responsabilidad". Además, expresó sus condolencias a los familiares de las víctimas.
Una estampida de fieles musulmanes en las afueras de la ciudad saudí de La Meca causó 717 muertos y 863 heridos, en la que es la peor tragedia en la peregrinación hacia la ciudad santa del islam o "hach" desde 1990, cuando murieron 1.426 personas.