La ONU realizará una investigación oficial e independiente sobre el posible uso de armas químicas en Siria, anunció el secretario general del organismo, Ban Ki-moon.
La investigación comenzará "tan pronto como sea posible en la práctica", en respuesta a la petición del Gobierno de ese país, que acusa a los rebeldes de haber usado proyectiles de artillería con sustancias químicas, explicó Ban en una declaración a la prensa en la sede de Naciones Unidas.
El secretario general explicó que tiene el mandato de lanzar una investigación si un Estado miembro de Naciones Unidas solicita que se estudie el posible uso de armas con sustancias químicas, bacteriológicas o con toxinas, tal como establecen resoluciones de la Asamblea General y el Consejo de Seguridad.
"Estoy, por supuesto, al corriente de que hay alegaciones de casos similares sobre el supuesto uso de armas químicas" por parte del régimen de Bachar al Asad, dijo el diplomático surcoreano.
Divisiones internas en la ONU
La aludida petición del Gobierno sirio se realizó ayer y fue seguida por una nueva división en el Consejo de Seguridad respecto de conflicto en Siria.
Rusia apoyó la solicitud del Gobierno sirio, mientras que Francia y otros países del Consejo intentaron sin éxito pedir al secretario general que formara una misión neutral para investigar tanto las denuncias del régimen como las de la coalición opositora, una petición a la que se opuso frontalmente Moscú.
"Mi anuncio debe recordar de forma inequívoca que el uso de armas químicas es un crimen contra la humanidad. La comunidad internacional necesita una garantía completa de que los arsenales de armas químicas están controlados de forma verificable", afirmó hoy Ban Ki-moon.
Reconoció que la investigación será una misión "difícil", por lo que pidió "cooperación total" y "acceso sin restricciones" tanto al Gobierno como a la oposición de Siria, y recordó que en los dos años de conflicto civil ha recordado reiteradamente al régimen de -incluso con dos cartas al presidente Bachar al Asad- que era responsabilidad de su Gobierno garantizar "la seguridad" de los arsenales de armas químicas de ese país.
También indicó que ya ha hablado con los responsables de la Convención para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ, con sede en La Haya) y la Organización Mundial de la Salud (OMS, sita en Ginebra) para estudiar las modalidades de la misión de investigación, y "todos me han asegurado su pleno apoyo".
Confió, en este sentido, que la misión "contribuirá a garantizar la seguridad de los arsenales de armas químicas en Siria".