La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, acogió este sábado con satisfacción la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para acabar con el arsenal químico de Siria y lo consideró "un paso importante".
La alta representante de la UE estimó que este plan avanza "hacia una respuesta sostenible a nivel internacional y unificada a la crisis", expresó a través de un comunicado.
"Esta decisión debería allanar el camino para la eliminación de las armas químicas en Siria, y establecer un estándar para la comunidad internacional para responder a las amenazas que plantean las armas de destrucción masiva", señaló Ashton.
La diplomática británica destacó también que la resolución de la ONU, de carácter vinculante, condena los ataques del 21 de agosto y exige responsabilidades, al tiempo que recalcó el hecho de que contemple una "reacción internacional contundente en caso de incumplimiento".
"La UE reitera su disposición a apoyar las acciones previstas en la resolución, así como en virtud de la decisión del Consejo Ejecutivo de la OPAQ", afirmó y añadió que no se debe perder de vista que lo más importante es "poner fin a la violencia y avanzar hacia una transición pacífica y democrática en Siria".
Ashton manifestó su satisfacción debido a la propuesta contenga un "aval muy claro" al acuerdo alcanzado en Ginebra el 30 de junio de 2012 y pidió que se convoque una conferencia de seguimiento tan pronto como sea posible.
Los inspectores de la OPAQ se desplegarán como máximo el próximo martes en el país árabe, para comenzar a analizar las instalaciones sobre las que el Gobierno sirio facilitó información, una tarea para la que contarán con un máximo de 30 días.
Mientras tanto, en los próximos siete días, Damasco tendrá que facilitar a la organización el resto de datos sobre su arsenal químico, incluidos el tipo de gases y toxinas de los que dispone, los detalles de las municiones, y la localización exacta de todas las armas químicas y las plantas de producción.