Ban Ki-moon tenía previsto llegar la noche del domingo a Argentina para una visita oficial.
Sin embargo, su avión fue desviado y tuvo que adoptar un "plan B" para poder reunirse con Cristina Fernández.
En el día de su cumpleaños, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se vio obligado a viajar 700 kilómetros en autobús y desayunar en una estación de servicio del centro de Argentina debido a que su vuelo fue desviado por la nube de cenizas provenientes del Cordón Caulle que cubre el espacio aéreo argentino.
El funcionario tenía previsto llegar la noche del domingo a Buenos Aires en un vuelo procedente de Bogotá para iniciar una visita oficial al país, pero la nube de cenizas obligó a desviar el vuelo al aeropuerto internacional de Córdoba, unos 710 kilómetros al noroeste de Buenos Aires.
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| La llamativa situación afectó al funcionario justo el día de su cumpleaños. (Foto: EFE) |
Para poder llegar a tiempo a su reunión con la mandataria argentina, Cristina Fernández, que se celebró este mediodía en la Casa Rosada, Ban Ki-moon se vio obligado a viajar en un autobús común, junto a su comitiva, la extensa distancia.
El líder aprovechó de desayunar un típico alfajor santafesino en una estación de servicio en la que el vehículo hizo una parada, en las cercanías de la ciudad de Rosario.
En el encuentro bilateral, la propia Fernández bromeó con esta situación y le pidió disculpas a Ban, que justo hoy cumplió 67 años, pero precisó que lo ocurrido se debió a "cuestiones del clima, imposibles de controlar, ni siquiera por decretos de necesidad y urgencia" y que, en última instancia, el volcán responsable era chileno.
