El primer ministro de Australia, Scott Morrison, anunció este lunes la creación de una agencia dedicada a la recuperación de las zonas afectadas por los incendios que contará con 2.000 millones de dólares australianos (1.388 millones de dólares estadounidenses) en los próximos dos años.
El nuevo organismo, que estará encabezado por el ex jefe de la Policía federal Andrew Colvin, se dedicará a ayudar en la reconstrucción de casas e infraestructuras dañadas por los fuegos que arden en el país oceánico desde septiembre.
"Se hará lo que haga falta, cueste lo que cueste", dijo Morrison a la prensa tras reunirse con el comité de seguridad nacional de su gabinete.
El gobernante australiano señaló que la partida presupuestaria es independiente de otras ayudas ya aprobadas y aclaró que se trata de un compromiso inicial que podrá incrementarse si es necesario y aumentan los daños.
"Nos centramos en el coste humano y el coste de reconstrucción de las vidas de la gente (...) para garantizar que hacemos todo lo posible, tan rápido como podemos, para ayudar en los esfuerzos de recuperación", añadió.
La medida sigue a la del despliegue de 3.000 reservistas y una partida de 20 millones de dólares austrlaianos (13,8 millones de dólares estadounidenses o 12,4 millones de euros) para alquilar cuatro hidroaviones y otros medios aéreos que el primer ministro anunció el sábado, al final de una de las peores jornadas en esta oleada de incendios.
Morrison hizo el anuncio después de semanas de críticas por su falta de respuesta a los incendios, que se intensificaron el mes pasado tras irse de vacaciones a Hawái sin avisar en plena crisis, y que le expusieron al rechazo de los vecinos de las zonas afectadas, que se negaron a darle la mano y le insultaron cuando las visitó.
Los incendios, considerados entre los peores del siglo en Australia, han causado 23 muertos y han destruido más de 1.500 viviendas, la mayoría en los fuegos que arden desde finales de año, y han calcinado casi seis millones de hectáreas de terreno, lo que equivale a dos veces la superficie de Bélgica.