Corea del Norte calificó como "abuso de derechos humanos" espionaje de EE.UU.
Pyongyang rechaza que escuchas formaran parte de la "lucha contra el terrorismo internacional".
El régimen de Kim Jong-un cuestionó el espionaje de Estados Unidos.
Pyongyang rechaza que escuchas formaran parte de la "lucha contra el terrorismo internacional".
El régimen de Kim Jong-un cuestionó el espionaje de Estados Unidos.
El régimen comunista de Corea del Norte calificó como "un abuso de los derechos humanos" el espionaje del Gobierno de EE.UU. a jefes de Estado, funcionarios y decenas de millones de ciudadanos de todo el mundo.
"Intervenir comunicaciones secretas como mensajes privados para espiar es uno de los peores abusos de los derechos humanos", indicó la agencia estatal norcoreana KCNA, en un editorial que supone la primera alusión de Pyongyang al escándalo de espionaje que salpica a Washington.
Según la agencia, portavoz del régimen de Kim Jong-un, la justificación de EE.UU. de que las escuchas ilegales de la de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) tenían como fin la lucha contra el terrorismo internacional es "un pretexto".
"El objetivo del espionaje a gran escala en el extranjero por parte de EE.UU. es, obviamente, observar y vigilar todos los movimientos de otros países" y "recopilar secretos de diferentes áreas como política, defensa y economía" para "lograr la dominación del mundo", explicó.
Corea del Norte formó parte, junto a Venezuela, China, Irán, Irak y Rusia de la lista de "objetivos a largo plazo" para los agentes de la NSA en 2007, según un memorando oficial recopilado por el ex analista de la CIA Edward Snowden y cedido al diario estadounidense The New York Times por el británico The Guardian.
El Gobierno de la vecina Corea del Sur, aliada de EE.UU., pidió el martes a Washington una explicación "razonable" sobre las informaciones que incluyen a este país en la lista de los presuntamente espiados por la NSA.
Según los documentos revelados por Snowden, EE.UU. habría interceptado las comunicaciones privadas de hasta 35 jefes de Estado de todo el mundo y decenas de millones de ciudadanos.