Estados Unidos y Canadá no invitaron ni a China ni a Rusia a la cumbre de cancilleres en Vancouver sobre la seguridad y la estabilidad en la península de Corea, que se desarrollará entre el lunes 15 y el miércoles 17 de enero.
El llamado "Grupo de Vancouver" incluirá a los ministros de Exterior de Corea del Sur, Japón, además de Australia, Bélgica, Gran Bretaña, Colombia, Etiopía, Francia, Grecia, Luxemburgo, Holanda, Nueva Zelanda, Filipinas, Sudáfrica, Tailandia y Turquía.
"China y Rusia no fueron invitadas pero se les informará de los resultados del encuentro. (...) Hemos estado en contacto y creo que van a dar la bienvenida a muchas de las acciones que salgan de la cumbre", dijo este jueves en rueda de prensa el subsecretario de Estado de EE.UU. para Diplomacia Pública y Asuntos Públicos, Steve Goldstein.
La decisión de excluir a ambas potencias la tomaron "conjuntamente" Estados Unidos y Canadá, país anfitrión, así como la de no invitar a Corea del Norte y sí recibir a Corea del Sur.
Preguntado por si la cumbre no sería más útil incluyendo al mayor socio comercial de Corea del Norte, Goldstein indicó que Estados Unidos "tiene conversaciones regulares" con el gobierno chino sobre este asunto: "China trabaja con nosotros (en esto)", y subrayó que el gigante asiático y Rusia también están de acuerdo "en que las sanciones que han sido implementadas están teniendo efecto".
El subsecretario argumentó que Pyongyang no fue invitada a la cita porque sus autoridades "no han indicado que estén preparadas" para sentarse a la mesa, aunque dejó claro, eso sí, que el secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson, "habla de Corea del Norte en todas sus bilaterales".