Corea del Norte y Corea del Sur intercambiaron amenazas de cara a la conmemoración este domingo del cuarto aniversario del bombardeo norcoreano a la isla de Yeonpyeong, uno de sus mayores episodios de tensión en décadas.
"Los maniáticos provocadores serán golpeados o asesinados por el Ejército Popular de Corea. Es su inevitable y miserable destino", amenazó el comando militar del frente suroriental norcoreano a través de un comunicado publicado en la agencia KCNA.
Corea del Norte, que considera una victoria el bombardeo que terminó con cuatro víctimas surcoreanas el 23 de noviembre de 2010, censuró a Corea del Sur por organizar una ceremonia el domingo en la isla para conmemorar la efeméride y rendir homenaje a los caídos, dos civiles y dos militares.
Por su parte, el Gobierno surcoreano respondió que las "provocaciones" de Corea del Norte en referencia al bombardeo de Yeonpyeong "son la peor decisión y sólo conllevarán su autodestrucción", según afirmó un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores.
"No sólo no han pedido disculpas y sancionado a los responsables, sino que desvergonzadamente Corea del Norte nos ha culpado por su provocación en Yeonpyeong", lamentó el portavoz.
El régimen de los Kim siempre ha mantenido que su ataque de artillería por sorpresa a la isla fronteriza surcoreana del Mar Amarillo en 2010 fue la respuesta a una amenaza militar del Ejército surcoreano, versión que ha sido rebatida por la comunidad internacional y expertos.