El Gobierno de Perú aprobó este miércoles, Día del Trabajador, la primera subida en 18 años de las pensiones públicas, sistema en el que están afiliados alrededor de medio millón de peruanos.
Tras la reunión del Consejo de Ministros, el titular de la cartera de Economía y Finanzas, Carlos Oliva, informó que el aumento irá en función de las distintas escalas y segmentos que componen en el sistema.
El mayor incremento será del 20,48 por ciento para las pensiones más bajas, fijadas en 415 soles (85 mil pesos aproximadamente), que ahora pasarán a cobrar 500 soles (alrededor de 102 mil pesos).
El menor aumento será del 4,2 por ciento y se dará en la escala más alta, donde se cobraban 837 soles (unos 170 mil pesos) y que ahora pasará a ser de 893 soles (183 mil pesos).
Oliva indicó que se hará un cálculo en particular para las pensiones que estén por debajo de los 415 soles de manera que puedan aproximarse en lo posible a la nueva pensión mínima de 500 soles.
También habrá un aumento fijo de 35 soles (seis mil 780 pesos) para las pensiones de viudez, orfandad y ascendencia.
Aumento "fiscalmente responsable"
El ministro de Economía afirmó que este aumento es "fiscalmente responsable, gracias al aumento de la recaudación tributaria del año pasado", cuya tendencia espera que se mantenga en este ejercicio.
"Estamos completamente seguros de que el Estado peruano puede responder a este gran reclamo. Es un esfuerzo que ha tenido el Gobierno tras el crecimiento de la economía, que el año pasado se situó en el cuatro por ciento", recordó Oliva.
El Sistema Nacional de Pensiones (SNP) de Perú está administrado por la Oficina de Normalización Previsional (ONP) y exige a los trabajadores aportar el 13 por ciento de su sueldo durante al menos 20 años para poder disfrutar de una pensión a partir de los 65 años.
Sin embargo, la mayor cuota del mercado de las pensiones en Perú la ocupa el Sistema Privado de Pensiones (SPP), operado por las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), y con unos siete millones de afiliados.
La informalidad del mercado laboral de Perú ronda el 70 por ciento, por lo que casi la mitad los trabajadores peruanos no cotiza en ninguno de los dos sistemas, lo que equivale a unos 8,5 millones de personas, según datos de la Cámara de Comercio de Lima (CCL).