Cientos de voluntarios realizaron en el Lago Ness (Escocia) la mayor búsqueda en más de medio siglo para tratar de localizar al monstruo que supuestamente habita sus aguas, bautizado popularmente como "Nessie".
Casi 300 personas se registraron para participar en esta exhaustiva batida, que se llevó a cabo entre sábado y domingo, y terminó sin evidencia de la existencia del la criatura.
Los testimonios y el mito generado en torno a numerosos supuestos avistamientos llevan surgiendo en esa zona de las Highlands escocesas desde hace 90 años.
Según recuerda la cadena británica BBC, en abril de 1933 la directora de un hotel de la zona indicó que había visto una criatura del tamaño de una ballena en ese lago, uno de los grandes reclamos turísticos de Escocia.
DRONES E HIDRÓFONOS
La legendaria operación de búsqueda iniciada este fin de semana fue organizada por el Centro Lago Ness, en Drumnadrochit, y un equipo de búsqueda de voluntarios denominado Loch Ness Exploration.
El director general del Centro Lago Ness, Paul Nixon, dijo a la citada cadena de televisión que la operación no es solo una maniobra de relaciones públicas.
"Hay cientos de voluntarios a ambas orillas del Lago hoy, todos con el cometido de hallar respuestas a lo que es el Monstruo del Lago Ness", dijo.
Nixon recordó que "algunos de los avistamientos recientes son contactos sonares, que muestran objetos en las aguas profundas".
En esta batida se habilitaron drones equipados con cámaras infrarrojas que sobrevolaron el lago, y se empleó un hidrófono para detectar sonidos submarinos no habituales.
El tamaño del lago se extiende más de 36 kilómetros y cuenta con más de 200 metros de profundidad en algunos lugares, lo que dificulta las labores de exploración.
Además, contiene 7.452 millones de metros cúbicos, más que todos los lagos ingleses y galeses juntos.