El subsecretario del Departamento de Seguridad Nacional aseguró que los hombres detenidos en el Reino Unido tenían previsto llevar a cabo un "ensayo" o simulacro en los próximos dos días.
El complot desarticulado este jueves en Londres para hacer estallar aviones en el Atlántico, y que los terroristas pensaban "ensayar" en los próximos días, no incluía entre sus blancos a las ciudades de Estados Unidos, informaron las autoridades de ese país.
Así lo indicaron durante una conferencia telefónica con los periodistas, el subsecretario del Departamento de Seguridad Nacional, Michael Jackson, y Charles Allen, un experto en asuntos de inteligencia de esa agencia.
"Se trataba de un esfuerzo por destruir múltiples aviones comerciales", indicó Allen quien, junto a Jackson, resumió las medidas de seguridad adoptadas por EE.UU. tras el descubrimiento del complot.
Según las autoridades británicas, la intención de los terroristas era estallar hasta diez aviones comerciales en su trayecto entre el Reino Unido y Estados Unidos.
Las autoridades estadounidenses indicaron que los terroristas, presuntamente vinculados a la red Al Qaeda, tenían previsto llevar a cabo un "ensayo" o simulacro del plan en los próximos dos días.
Mientras tanto, la cadena televisiva ABC dijo en su página de internet que, para la voladura de las aeronaves, los terroristas planeaban ocultar explosivos, en forma líquida o de gel, en una botella modificada de bebidas isotónicas.
Citando fuentes estadounidenses anónimas, la ABC señaló que los terroristas iban a detonar la botella con el flash de una cámara desechable u otro artefacto electrónico.
Consultado al respecto, un portavoz del DHS, Jarrod Agen, dijo que para los datos específicos sobre el plan terrorista están "refiriendo las llamadas a las autoridades británicas". (EFE)
