El Ejecutivo británico descartó estar fomentando el "espionaje" de estudiantes, pero recalcó en un informe que los campus superiores son un apetecido "terreno de reclutamiento".
El Gobierno británico instó a las universidades del país a tomar en serio la amenaza terrorista e informar a las autoridades del proselitismo islámico radical dirigido a sus alumnos más vulnerables.
En el contexto de la creciente preocupación por el incremento del extremismo que apela al Islam para predicar el odio y la violencia, el Ejecutivo publicó este viernes un informe según el cual los centros de enseñanza superior constituyen un excelente "terreno de reclutamiento" para los extremistas de ese signo.
El informe denuncia casos concretos de utilización de centros de oración para reuniones radicales o de la exhibición en una biblioteca universitaria de videos difundidos por internet y en los que se enseña a fabricar bombas.
El documento incluye consejos sobre la forma de actuar si se sospecha que ciertos grupos distribuyen panfletos extremistas entre los estudiantes o si clérigos extremistas visitan esos centros.
Los vicecancilleres de las universidades británicas deberían preguntarse, según el Gobierno, si el personal docente es capaz de de identificar eventuales comportamientos violentos extremistas y tiene la valentía de informar al respecto.
Según el secretario de Estado para Enseñanza Superior, Bill Rammell, las recomendaciones son "un reconocimiento de que el extremismo violento en nombre del Islam constituye una amenaza real, creíble y constante en el Reino Unido".
Rammell aclaró que no se trata de que las universidades y otros centros se dediquen a espiar a los alumnos, pero "es un problema grave al que tenemos que hacer frente".
Su asesor, el jeque Musa Admani, capellán musulmán de la Universidad Metropolitana de Londres, dijo esta semana que en al menos cuatro universidades del Reino Unido los estudiantes musulmanes han sido "adoctrinados" por radicales.
Sin embargo, Sally Hunt, secretaria general del Sindicato de Universidades y Colegios Mayores, expresó su preocupación por el impacto negativo que las nuevas directrices pueden tener sobre la libertad de expresión.
La Unión Nacional de Estudiantes se había adelantado a la publicación de las recomendaciones del Gobierno, advirtiendo que "estigmatizar a las comunidades estudiantiles no es la forma de combatir el terrorismo". (EFE)
