El canciller de Venezuela, Yvan Gil, arremetió contra el Presidente Gabriel Boric, después de que subiera el tono respecto al proceso electoral en Venezuela, denunciando por primera vez un intento de fraude por parte del régimen de Nicolás Maduro.
Este miércoles, desde el Palacio de La Moneda, el Mandatario aseguró: "No tengo dudas de que el régimen de Maduro ha intentado cometer un fraude. Si no, hubiesen mostrado las famosas actas. ¿Por qué no lo han hecho?".
"Chile no reconoce el triunfo autoproclamado de Maduro", enfatizó el Jefe de Estado, que había "quedado debiendo" esta declaración pública, pues el día lunes -en medio de la visita oficial de Lula da Silva- la había comprometido para ayer martes, lo que, finalmente, no sucedió.
A través de su cuenta en X, el ministro de Exteriores venezolano aseveró que, con estas declaraciones, Boric "se coloca a la derecha de (el presidente argentino Javier) Milei y del Departamento de Estado de los EEUU", que también han advertido irregularidades en el proceso.
Gil luego acusó que al Presidente "se le cayó definitivamente la máscara, queda al desnudo su gobierno pinochetista y golpista", haciendo una referencia directa a la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
"NO VAMOS A CAER EN PROVOCACIONES"
La ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, respondió al canciller venezolano y dijo que "nosotros no vamos a caer en provocaciones de ese tipo, obviamente son declaraciones totalmente inapropiadas, más allá de totalmente alejadas de la realidad. Lo importante es que el Presidente de la República tiene una sola línea, un compromiso, que es con la democracia y los derechos humanos y el respeto irrestricto a la soberanía de los pueblos".
"Eso lo va a marcar desde dónde y en el momento que sea necesario hacerlo, independientemente del país a qué se refiera y en el lugar donde esté", añadió.
El canciller ya había criticado a Boric la noche del martes, también en redes sociales, después de que el Mandatario condenara la apertura de una investigación contra la líder opositora María Corina Machado y el candidato presidencial de la oposición mayoritaria, Edmundo González Urrutia.
A juicio del ministro, el Gobierno de Chile "se arrodilla ante los desmanes de la ultraderecha y el fascismo, acá sí tenemos un Estado fuerte y una justicia que protege al pueblo y que no lo persigue, como ocurre en su país, donde ser de izquierda es muy peligroso".
En la misma línea de su publicación de hoy, sostuvo que "quien llame a un golpe de Estado, a lo Pinochet, será investigado y juzgado en nuestro país. Si usted se rindió y entregó a esta práctica, es su problema, no nos involucre en sus falencias ideológicas y democráticas".
Si bien Boric enfatizó en esta jornada que Chile no reconoce la "autoproclamada" victoria del actual gobernante de Venezuela, reiteró la tesis de que no es idóneo en esta etapa del proceso reivindicar el presunto triunfo de Edmundo González.