Estados Unidos quiere impulsar su nuevo diálogo con Venezuela sin poner condiciones y "con muy buena voluntad" para ayudar a que sean los propios venezolanos los que resuelvan "los retos" del país de forma "permanente".
"Nosotros estamos tratando de impulsar que haya un diálogo, no estamos poniendo condiciones, los venezolanos hablando con venezolanos es lo que va a resolver los retos que hay en Venezuela de una forma constructiva y permanente", dijo hoy la secretaria de Estado adjunta interina para Latinoamérica, Mari Carmen Aponte, en conferencia de prensa en la Asamblea de la OEA en la capital dominicana.
Este martes, el jefe de la diplomacia estadounidense, John Kerry, y su homóloga venezolana, Delcy Rodríguez, acordaron reanudar el diálogo bilateral en un encuentro privado en los márgenes del encuentro anual de cancilleres de la Organización de Estados Americanos (OEA), que concluye hoy en Santo Domingo.
"El primer acercamiento sucedió ayer, (el subsecretario de su Departamento para Asuntos Políticos Thomas) Shannon, todavía no tiene fecha, yo estoy segura de que en un futuro relativamente temprano y en el momento apropiado hablaremos más de fechas y de otros asuntos", explicó Aponte.
Presiones para el referendo revocatorio
Kerry, pocas horas antes de proponerle la apertura del diálogo a Rodríguez, aumentó la presión sobre Venezuela al sumarse al secretario general de la OEA, Luis Almagro, en la petición de que el Gobierno permita celebrar el referendo revocatorio que pide la oposición "a tiempo", es decir, este año.
El secretario de Estado pidió a Venezuela frente a los 34 países de la OEA (todos menos Cuba), que "libere a los presos políticos, respete la libertad de expresión y de reunión, alivie la escasez de alimentos y medicinas y honre los propios mecanismos de la Constitución incluyendo un referendo revocatorio a tiempo".
Preguntada por si esos elementos formarán parte del diálogo entre su país y Venezuela, Aponte dijo que "esas peticiones están vivas".
"Pero tengo que subrayar que EE.UU. cree en el diálogo y los acercamientos que están sucediendo puntualmente. La relación de Estados Unidos con Venezuela es un proceso, ayer en la reunión bilateral se hablaron de todos los temas que mencionó (Kerry en su intervención en la Asamblea el martes) y del diálogo también", señaló.
"Y seguiremos sobre la marcha con una serie de reuniones, estamos comenzando un proceso en el cual de muy buena voluntad exploraremos cómo podemos ayudar a solucionar alguno de los temas por los que el pueblo venezolano está pasando", añadió.
La aplicación de la Carta Democrática a Venezuela
Preguntada por si EE.UU. apoyará la aplicación de la Carta Democrática a Venezuela, como ha propuesto Almagro, Aponte evitó dar un sí o un no pero defendió la importancia de este instrumento jurídico que la OEA aprobó por unanimidad en 2001.
"El artículo 20 implica un proceso, hay varias etapas, sin lugar a duda el secretario Kerry al igual que el presidente (Barack Obama) están en concordancia sobre que la Carta Democrática es un instrumento bien fuerte que nos une y en el 2001 se aprobó como el compás democrático para el hemisferio", afirmó.
"Es un proceso, estaremos allí el 23 para recibir el reporte (de Almagro sobre Venezuela), empezar la discusión y las deliberaciones, que seguramente no van a terminar el mismo día que se hablen", apuntó.
"Hemos apoyado públicamente, y lo hizo también el secretario Kerry, este llamado de Almagro para que haya una discusión dentro de la OEA sobre todos los aspectos de la situación nacional en Venezuela, también la conversación del 21 con los tres ex presidentes", añadió Michael Fitzpatrick, representante alterno de EEUU ante la OEA.
"Los dos van juntos, es parte de un proceso, son los próximos pasitos", agregó.
A petición de Venezuela, la OEA recibirá el día 21 en su sede de Washington a los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero (España), Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá), que encabezan la iniciativa diálogo entre Gobierno y oposición venezolana auspiciado por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
La misión de Venezuela se adelanta con este paso a la sesión convocada para el 23 de junio para debatir si la OEA aplica su Carta Democrática a Caracas, el instrumento jurídico al que ha recurrido Almagro para aumentar la presión internacional sobre el Gobierno de Nicolás Maduro y que, de prosperar, podría llevar a gestiones diplomáticas, resoluciones o, en último lugar, a la suspensión de Venezuela del ente.