Tras la misa exequial, el general Ricardo Hargreaves declaró a un diario de Punta Arenas que participó de la causa del ex dictador y que el país le debía "muchas cosas" al desaparecido gobernante de facto.
El Ejército comunicó la noche del jueves que el comandante en jefe de la institución, Oscar Izurieta, pidió la renuncia al general de División Ricardo Hargreaves Butrón, quien el pasado martes señaló que fue "partícipe de la causa de Pinochet y la sigo compartiendo".
En un nuevo coletazo institucional de la muerte del ex dictador Augusto Pinochet, Hargreaves, que se desempeñaba como comandante en jefe de la V División de Ejército con asiento en Punta Arenas, deberá dejar su uniforme por sus dichos vertidos al diario local La Prensa Austral.
El general Hargreaves afirmó al periódico, tras la misa exequias, que "le debemos muchas cosas, no solamente como Ejército, sino como país" al ex dictador.
Hargreaves sostuvo que el ex gobernante de facto "fue capaz de asumir una gran responsabilidad, en un momento cuando el país estaba absolutamente convulsionado y colapsado".
"El asumió esa responsabilidad. El luchó por lo que creyó era importante para Chile. Yo fui partícipe de esa causa. La compartí plenamente y la sigo compartiendo, y creo que lo que hizo el general Pinochet hoy día es lo que está disfrutando el país, de tremendo bienestar y empuje, gracias, sin duda, a la obra del general Pinochet", dijo el general.
La baja de Ricardo Hargreaves se suma a la del capitán Augusto Pinochet Molina, nieto del ex dictador, quien fue dado de baja el miércoles luego de sus polémicas declaraciones en el homenaje del Ejército al ex comandante en jefe de la institución.
En su discurso, que estaba fuera de protocolo y no tenía la autorización de sus superiores, Pinochet Molina reivindicó la figura de su abuelo señalando que había "salvado al país del marxismo" y criticó a los jueces que lo investigaron aduciendo que buscaban más fama que justicia.
Dichas declaraciones causaron molestia en el Gobierno y la reacción del Ejército que, por respeto al dolor de los Pinochet esperó más de 24 horas para comunicar la baja, fue tomada -según dijo Izurieta- en el mismo momento en que el hijo de Augusto Pinochet Hiriart terminó su discurso. (Cooperativa.cl)
