Tras los sendos hallazgos esta semana de osamentas humanas en dos puntos de Santiago, familiares de detenidos desaparecidos participaron este viernes de una reunión en el Ministerio de Justicia con el jefe de esta cartera, Luis Cordero, para abordar esta situación que -aseguran- les preocupa y causa extrañeza.
El primero ocurrió durante la tarde del miércoles en el Ministerio de Justicia, en dependencias del Programa de Derechos Humanos, donde fue encontrado un pote de margarina con una mandíbula y piezas dentales en su interior.
En tanto, ayer fueron halladas osamentas en el entretecho de una vivienda en Ñuñoa, a pocos metros de un excentro de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), primera policía secreta de la cruenta dictadura de Pinochet.
"Ahora nuevamente estamos siendo testigos de hallazgos que nos preocupan y nos parecen bastantes extraños en las condiciones que están apareciendo", advirtió Mónica Monsalves, directora de la Corporación Memorial Cerro Chena.
"Es muy doloroso enterarnos de que se han encontrado osamentas en diferentes calidades, en un contenedor de mantequilla, en cajas de mercadería", expresó, al tiempo que conjeturó que, dadas las circunstancias en que ocurrieron los hallazgos, "puede haber una intención detrás de esto".
Anselmo Cancino, de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Linares, afirmó que es "absolutamente delicado que esto ocurra en espacios tan institucionales".
"Genera también en nosotros cierta sospecha y desconfianza, no obstante, el ministro planteó su compromiso con un manejo más adecuado de esta situación, del punto de vista de los protocolos que se tienen que activar", comentó también el dirigente, hijo del detenido desaparecido Anselmo Cancino Aravena.
Por este hecho, la Subsecretaría de Derechos Humanos abrió un sumario para determinar las circunstancias en que las piezas óseas llegaron a la institución; en tanto que se envió los antecedentes al juez Mario Carroza, de la Corte Suprema, coordinador nacional de causas sobre violaciones a los derechos humanos, para que adopte las medidas que estime pertinentes.
MINISTRO PROMETE "CERTEZAS" PARA EVITAR ESPECULACIONES
El ministro Cordero admitió que "cualquier hallazgo de estas características genera ansiedad", ante lo cual "la responsabilidad nuestra es hablar de hechos e informar sobre las medidas que estamos desarrollando, para dar certezas de que el Estado está ejecutando acciones".
"Informar oportunamente y evitar que se preste a especulaciones de terceros es parte de nuestra responsabilidad", enfatizó.
Las indagaciones quedaron a cargo de la Brigada de Derechos Humanos de la Policía de Investigaciones (PDI).
Los antecedentes serán derivados al Servicio Médico Legal, que deberá determinar el período al que corresponden los restos: si la data apunta a la época de la dictadura, los casos serán tomados por los jueces con dedicación exclusiva; si no, las investigaciones las llevará el Ministerio Público.