Ernesto Galaz, compañero del oficial asesinado, contó detalles de las torturas en Cooperativa.
Agregó que "me parece extraño que la justicia chilena no investigue".
El comandante en retiro de la FACh Ernesto Galaz reafirmó en Una Nueva Mañana en Cooperativa que el general Fernando Matthei, quien fue parte de la junta de Gobierno, tiene algo que decir en los apremios que llevarion a la muerte al general Alberto Bachelet, ya que era "el dueño de casa" de la Academia de Guerra cuando ocurrieron las torturas.
Bachelet murió el 12 de marzo de 1974 a causa de las torturas que sufrió durante seis meses y que le provocaron un paro cardiorrespiratorio, crimen por el que este martes fueron sometidos a proceso los coroneles en retiro Edgard Ceballos y Ramón Cáceres.
El comandante (r) agregó que el general Fernando Matthei, quien luego fue miembro de la Junta de Gobierno de la dictadura, tiene algo que decir en este caso: "Matthei fue nombrado director de la Academia de Guerra Aérea cuando volvió de Londres, a fines de 1973, y ese lugar fue un centro de tortura hasta fines de 1974. Entonces él era dueño de casa cuando ahí se practicaba todo este tipo de apremios".
Agregó que "me parece extraño que la justicia chilena no investigue. Basta con que digan yo no estaba y listo. Investiguen si estaba, pregunten si estaba".
Galaz también aseguró que no tiene "ninguna duda de que Cáceres y Ceballos fueron los torturadores. Ellos fueron alumnos míos en la Academia de Guerra Aérea. Yo les conocía la voz y estúpidamente Ceballos se ponía un lápiz entre los labios para interrogar. Y recuerdo muy bien que le decía que se sacara el lápiz porque sabía quién era".
"Toda la Fuerza Aérea sabía de los problemas cardiacos del general Bachelet. En tiempos normales tuvo problemas cardiacos de tal naturaleza que la Fuerza Aérea quiso darlo de baja por salud. Y él se las ingenió para demostrar que a pesar de tener problemas cardiacos podía seguir trabajando en la Fuerza Aérea. Eso le permitió llegar a general", afirmó Galaz.
Con esto descartó que hubiera desconocimiento de dichas afecciones por parte de quienes lo sometieron a apremios ilegítimos durante su prolongada detención, basada en una supuesta traición a la patria.
El ex compañero de Alberto Bachelet expresó que "para nosotros sería muy gratificante que este juicio que se está siguiendo contra Ceballos y Cáceres no se quede en la cáscara. Que vaya más a fondo. Que busquen a los responsables intelectuales de esta situación tan bochornosa. Que no cierren el caso con darles 360 días de presidio remitido a Cáceres y Ceballos. Que vayan más allá. El general Leigh se murió ya, no podríamos llegar hasta él, pero hay varios que están vivos, el general Matthei, el general Figueroa, el general González".
Sin embargo, Galaz desconfió porque "la justicia chilena que no ha sido capaz de saber hoy dónde está la plata que robó Pinochet, difícilmente va a llegar más lejos".
