Un accidente carretero costó la vida, la madrugada de este sábado, a Nelson Salgado, de 30 años, superintendente de Bomberos de Olmué, en momentos en que regresaba a la ciudad luego de colaborar con las tareas de auxilio en Chañaral.
La tragedia ocurrió pasada la 01:00 de la madrugada a la altura del kilómetro 710 de la Ruta 5 Norte, cuando, por razones que se investigan, el vehículo que trasladaba a Salgado y otros tres bomberos chocó por alcance a otro vehículo y volcó a un costado de la carretera.
El superintendente falleció en el lugar y los otros tres voluntarios -Jeannete Vega, Carolina Gaete y Víctor Pizarro- sufrieron lesiones de diversa consideración.
"Ellos venían felices, tranquilos de haber ayudado a sus hermanos, y lamentablemente entre Copiapó y Vallenar tuvieron un choque por alcance, luego se produce un derrape y finalmente dan vueltas", explicó el presidente del Consejo de Bomberos de Atacama, Nelson Cortés.
Entre los lesionados Víctor Pizarro ya fue dado de alta, mientras sus dos compañeras de comitiva permanecen hospitalizadas en el centro de salud de Vallenar.
Según los primeros antecedentes de lo ocurrido, el furgón de Bomberos chocó la parte trasera de un auto que trasladaba a una familia antes de volcarse a un costado del camino, por lo que no se descarta que el conductor se haya dormido al volante.
Alcaldesa de Olmué: Tenemos rabia
El gobernador de la provincia de Marga Marga, Gianni Rivera, indicó que se están ultimando los detalles para llevar de vuelta a Valparaíso los restos de Nelson Salgado.
"Esperamos que llegue el cuerpo para rendirle los honores que corresponde y esperamos también trasladar a los heridos", dijo la autoridad, quien afirmó que se encuentran apoyando a las familias y compañeros de los involucrados.
Por su parte la alcaldesa de Olmué, Macarena Santelices (independiente), acompañó a la familia del fallecido hasta Vallenar y acusó, emocionada, que este tipo de accidentes son evitables.
Nelson Salgado de 30 años era además jefe de emergencias de Olmué. (Foto: Bomberos)
"No tenemos palabras, porque Nelson era un joven de 30 años, incondicional con los necesitados, no sólo superintendente sino que jefe de emergencias de Olmué... Tenemos rabia, porque esto no le corresponde a Bomberos, no les correspondía reaccionar ante una tragedia", afirmó.
La autoridad comunal agradeció que sus pares de la zona dispusieran una avioneta para la familia de Nelson Salgado, pero a la vez criticó que el Gobierno central "no haya dispuesto los recursos necesarios" que forzaron el desplazamiento de los voluntarios.
Tras la entrega del cuerpo del fallecido superintendente, en su regreso a Olmué, los representantes de Bomberos de Atacama, Coquimbo y Valparaíso escoltarán por relevos el cortejo, a modo de homenaje, durante todo el trayecto.