Este martes es dado de alta desde el Hospital Clínico de la Universidad Católica el estudiante de la carrera de Letras Rodrigo Avilés, quien resultó con un TEC por el accionar del carro lanzaaguas de Carabineros durante las manifestaciones sociales del pasado 21 de mayo en Valparaíso.
El joven de 28 años presentó mejoras significativas en su estado de salud, lo que le valdrá dejar el recinto asistencial a dos meses exactos de su internación, tiempo en el que incluso estuvo estado de coma en el Hospital Carlos van Buren de Valparaíso.
Allí, Avilés debió ser sometido a dos operaciones de extrema gravedad para extraerle segmentos de cráneo antes de ser trasladado a Santiago el pasado 8 de junio.
Para fortalecer sus acciones motoras, especialmente del lado izquierdo, que fue el más afectado, Avilés asistió diariamente al gimnasio del Hospital Clínico de la UC y subió y bajó escaleras para ejercitar sus músculos.
"Consciente, lúcido y contento"
"Su evolución desde todo punto de vista fue muy favorable. Hasta la fecha se ha recuperado mucho", dijo pasadas las 11:00 horas de hoy en un punto de prensa el médico Patricio Sandoval, jefe de Neurología del Hospital UC, quien precisó que el alta definitiva se realizará "de forma privada en el transcurso del día".
"Estamos muy contentos y muy satisfechos por la buena evolución que ha tenido Rodrigo desde todo punto de vista durante su hospitalización. Él se encuentra en buenas condiciones, consciente, lúcido, bien animado, contento porque se va para su casa y con muchas ganas de seguirse rehabilitando. Hasta la fecha el proceso ha sido muy exitoso", añadió.
El facultativo aclaró que "él (Rodrigo) va a estar bajo un equipo multidisciplinario: kinesiólogos, terapeutas ocupacionales, sicólogos, neurosicólogos, todo un equipo con toda nuestra institución a su disposición para optimizar y maximizar su recuperación. Eso está coordinado y viene un proceso que va a ser largo, pero que hasta aquí ha sido muy exitoso".
Familia espera "responsabilidades"
En tanto, Soledad Bravo, madre de Avilés, sostuvo que la familia espera "que las responsabilidades se hagan presentes, que efectivamente los responsables de lo que le sucedió a Rodrigo den un paso adelante y reconozcan y asuman".
"Las disculpas siempre son bienvenidas, porque son gestos humanos, pero también estamos esperando gestos institucionales. Estamos esperando que Carabineros entregue los resultados de su sumario y la resolución de esto tiene que ser por las vías institucionales, no estamos esperando nada más que eso", agregó.
La madre aseveró que "lo que le sucedió a nuestro hijo no fue un accidente, sino que una muestra de la desprotección de los derechos constitucionales más básicos y la desnaturalización fehaciente de la misión de las FF.EE. de Carabineros, institución de la que todavía esperamos palabras y acciones reparatorias".
Félix Avilés, el padre del joven, dijo esta mañana a Cooperativa que su alta "es una noticia bastante alentadora y esperanzadora por lo que viene por delante".
"Él está subiendo pisos acompañado por kinesiólogos, transita por toda la clínica, come solo", relató, detallando que, sin embargo, aún presenta secuelas en el área neurocognitiva, principalmente en lo referido a la memoria a corto plazo, por lo que seguirá trabajando junto a especialistas.
La situación del estudiante generó numerosas muestras de solidaridad en los actores sociales, y complicó al Gobierno y Carabineros. (Foto: UNO)
Sobre la responsabilidad de Carabineros, Avilés afirmó que "lo que a mí me preocupa es que el informe definitivamente evacue la verdad de lo que sucedió, las responsabilidades, no del carabinero que iba en el carro, sino que aquí hay responsabilidades administrativas que tienen que ver con un tema de doctrina, de cómo se plantean las Fuerzas Especiales frente a los ciudadanos".
Añadió que hay dos acciones en curso, "una es por injurias y calumnias contra el diputado (Gustavo) Hasbún y la otra es la querella por la cual nos hacemos parte en la investigación del Ministerio Público".
Tras esto, el estudiante continuará su período de rehabilitación en su domicilio, pero tendrá que seguir visitando el centro médico periódicamente.
Por este caso el 28 de mayo pasado Carabineros dio de baja al sargento Manuel Noya, el funcionario que disparó el chorro de agua "fuera de protocolo" de manera directa contra Avilés, luego que imágenes de televisión demostraran la dinámica de los hechos, ya que primeramente la institución atribuyó las lesiones del estudiante a un "hecho fortuito".