Este jueves vence el plazo autoimpuesto por el Gobierno para ingresar al Congreso el proyecto de reforma a la educación superior y la ministra Adriana Delpiano confirmó que esta semana será el envío de la iniciativa.
Se trata de uno de los proyectos más emblemáticos del programa de la Presidenta Michelle Bachelet y la titular de Educación ratificó que "lo vamos a enviar en esta semana, sin lugar a dudas, esto es así".
"¿Qué día exacto? Tenemos todavía reuniones, estamos en semana distrital, el lunes estará en los escritorios de los parlamentarios", anunció.
Algunos de los objetivos de la iniciativa son fijar las reglas para la gratuidad y la forma en que se ampliará la cobertura, reformar el sistema de acreditación de las instituciones y crear una Subsecretaría de Educación.
Hasta el Mineduc llegaron los rectores del G-8, el grupo de universidades privadas adscritas al sistema único de admisión, en busca de detalles y salieron poco conformes.
El rector de la Universidad Mayor, Rubén Covarrubias, sostuvo que "se confirmó lo que nosotros temíamos y que éste es un proyecto que está orientado a darle mucho más poder e intervención al Estado en el sistema, obliga a las universidades a elegir entre meterse al sistema mal llamado de la gratuidad o vivir las penas del infierno".
Mientras que el rector de la Universidad del Desarrollo, Federico Valdés, aseveró que "hemos sido testigos en las últimas semanas a través de los medios cómo esta especie de gremio que se llama Consejo de Rectores han estado discutiendo los unos y los otros entre los estatales y los no estatales por una especie de botín, que son los recursos públicos".
Preocupación en el Cruch y movimiento estudiantil
También hay preocupación en el Consejo de Rectores (Cruch), donde su presidente y rector de la Universidad de Valparaíso, Aldo Valle, dijo que el proyecto no cambiará profundamente el sistema.
"No se aprecia con claridad los ejes transformadores. ¿Seguirá habiendo financiamiento estatal para el mercado de la educación superior? La reforma, hasta ahora, promete una mayor regulación pero no una transformación del sistema de educación superior del país", expresó.
La ministra Delpiano se mostró dispuesta a mayores sanciones en caso de lucro, aseverando que "lo que pasa es que estamos considerando, de alguna manera, el lucro en forma mucho más dura".
La Confech convocó a una marcha y paro para el próximo martes 5 de julio. (Foto: UNO)
Se trata de una de las demandas históricas del movimiento estudiantil, peticiones que según la vocera de la Confech y presidenta de la FECh, Camila Rojas, deben estar en la reforma.
"Nuestras expectativas están puestas en que se consideren efectivamente una reconstrucción de la educación pública, que se saque al mercado de la educación, que se pueda penalizar el lucro, que se condone la deuda", declaró la dirigenta.
Por su parte, el vocero de la ACES, Diego Arraño, llamó a no enviar el proyecto, expresando que "no ingrese si no es conversado con el movimiento estudiantil. El movimiento estudiantil tiene propuestas, tiene demandas".
Cabe mencionar que la Confech convocó a una marcha y paro para el próximo martes 5 de julio con el objetivo de posicionarse cuando comience a discutirse la reforma en el Congreso.
